«La Diócesis de San Cristóbal da a conocer con gran vergüenza y profundo dolor que un miembro de su presbiterio, Nepomuceno Hernández, ha sido imputado de abuso sexual contra una adolescente», dice un comunicado. El mismo está firmado este 15 de agosto por monseñor Mario del Valle Moronta Rodríguez, obispo de la diócesis de San Cristóbal en Venezuela.
El padre Nepomuceno Hernández Blanco fue detenido el sábado 13 de agosto, en San Cristóbal (estado Táchira), por efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC). Esto luego que fuera denunciado por el presunto abuso sexual cometido contra una niña de 13 años de edad.
La Diócesis no encubrió este abuso
«El mencionado sacerdote fue detenido por las autoridades policiales. Y ya fue presentado al tribunal respectivo, que le ha dado privación de libertad e iniciado el debido proceso», acota el vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana.
«Es un hecho lamentable que no tiene justificación alguna», indica Moronta en la misiva que fue enviada a Aleteia desde la diócesis de San Cristóbal en Venezuela.
Asimismo, precisa que la autoridad eclesiástica ha garantizado al Fiscal Superior del Estado Táchira y otras autoridades competentes, «que ni se opondrá ni interferirá en las investigaciones y actuaciones que por este hecho se tienen que realizar».
En este sentido, asegura el obispo del Táchira a través del comunicado, que «la Diócesis de San Cristóbal no avala ni encubre casos como el presente».
El sacerdote es responsable de sus actos
Un detalle que resalta el comunicado firmado por Mario Moronta es que las responsabilidades de estos hechos recaen sobre el sacerdote involucrado. Este hombre debe responder por ellos ante la ley civil y la eclesiástica.
«Tiene derecho a su defensa para lo cual tendrá la asistencia de un abogado que él mismo designe», dice. Al mismo tiempo, la Diócesis de San Cristóbal en Venezuela «muestra su preocupación y ofrece su acompañamiento a la víctima de este bochornoso acto».
Suspendido del ejercicio sacerdotal
De acuerdo con el comunicado, la diócesis tachirense abrirá el proceso según las leyes y normativas de la Iglesia. La decisión más inmediata, asumida por la iglesia diocesana, ha sido la suspensión de todo cargo y responsabilidades que tenía como presbítero.
«En virtud de ello, el obispo diocesano ha suspendido del ejercicio del ministerio al padre Nepomuceno Hernández y le ha destituido de los cargos pastorales que ejercía. A la vez, inicia el proceso canónico correspondiente, según los protocolos y normativas en los casos de abuso sexual en contra de niños, niñas, adolescentes y personas vulnerables».
Una menor de 13 años
El comunicado de Moronta llegó después del anuncio de Tarek William Saab, fiscal general de la República Bolivariana de Venezuela, a través de su cuenta en Twitter. Fue ahí donde habló de la detención e imputación del presbítero Nepomuceno Hernández.
El presunto abusador es párroco de la iglesia San Juan Bautista de San Cristóbal, Táchira. Por su parte, la agraviada es una niña de 13 años de edad de la que, en resguardo de su privacidad, el fiscal general solo dio a conocer las siglas C.Y.J.V.
Según informó Tarek William Saab, el párroco de la iglesia conocida como «La Ermita de San Cristóbal», cometió el abuso bajo los efectos del alcohol. Ahí invitó a la adolescente a comer y luego procedió a agredir sexualmente.
Se conoció que el «padre Nepo» fue ordenado sacerdote el 13 de octubre de 1991. Trabajó como formador en el Seminario Santo Tomás de Aquino de la diócesis de San Cristóbal. También fue párroco en San José, en Torbes; Sagrado Corazón de Jesús, en la ciudad de San Cristóbal; San José, en Colón; y en la Basílica del Espíritu Santo, en La Grita.
El dolor de la Iglesia ante el abuso sexual contra niños
El pasado 6 de julio, ante las denuncias hechas a través de un medio internacional, donde se señaló la existencia de presuntos abusos a menores, el Episcopado Venezolano dio respuesta. Lo hizo actualizando un instructivo para impedir estos hechos.
Justamente monseñor Mario Moronta dio la cara en una rueda de prensa, aunque en el listado de abusadores no fue mencionado el padre Nepomuceno Hernández.
Entonces dijo que la iglesia venezolana estaba «consternada y dolida» por el abuso sexual de sacerdotes contra menores. Con la acción de la diócesis de San Cristóbal, se dará inicio a la «Tolerancia Cero» pedida por el Papa. Y así evitar estos casos de abusos.