La práctica del aborto no es nueva, fueron la Rusia de Stalin en 1920 y la Alemania Nazi los primeros países del mundo en despenalizarlo. En América Latina el primer país que lo hizo fue la isla de Cuba en 1965.
De los 193 países que existen, solo 67 han despenalizado el aborto. Entre estos no figura México porque la despenalización es parcial, en la cdmx y en pocos estados se permite.
El pasado 24 de abril se cumplieron 15 años de la despenalizar el aborto en cdmx. Prometieron hace tres lustros que con eso disminuiría considerablemente la mortalidad materna y la realidad es que CDMX sigue siendo hoy por hoy una de las entidades federativas con mayor mortalidad materna.
Según un estudio elaborado por Melisa Institute y publicado en la Revista British Medical Journal Open, Ciudad de México ocupa en el país el lugar número 26 en Mortalidad Materna, solo por encima de estados como Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
Una vez más el bosque nos impide ver el horizonte, el tema es la mujer. Por pelear el aborto estamos olvidando lo que en verdad importa, la mujer. El día en que pongamos de verdad a la mujer al centro, el día en el que la mujer que deje de ser usada, ese día las mujeres mexicanas serán más libres.
Las batallas por el aborto en México han sido estériles porque, aunque se consiga despenalizarlo, el feminicidio, las violaciones y la mortalidad materna aumenta.
Basta saber que se dedican en la práctica muchas más horas y recursos en México a la lucha por la promoción del aborto que a la lucha por la salud y la seguridad de las mujeres.
Les comparto un dato interesante, @M_OlgaSCordero ha dedicado, siendo Secretaria de Gobernación y ahora Presidente de la Mesa Directiva del Senado, muchas más horas a promover el aborto que a promover la seguridad de las mujeres; los resultados hablan, mientras que los feminicidios y la mortalidad materna se incrementan, disminuyen los estados que penalizan el delito del aborto.
Adicionalmente hay que considerar que mientras los países de avanzada en el mundo están echando marcha atrás a leyes y sentencias que despenalizaron el aborto, como es el caso de la Corte Suprema de los Estados Unidos, en México se promueve frenéticamente con la bendición y el apoyo de personas que parecen estar atadas al pasado, como @m_ebrard o @ArturoSaldivarL, mejor conocido como Arturo Saldivar Lelo de la Rea.
El aborto, desde su origen, nació viciado. Su demanda jamás fue orgánica. Desde su origen, hace 70 años, fue artificial y ni siquiera nace en la cabeza de una mujer, fue un varón, que, obsesionado por controlar a la humanidad, destino su tiempo y fortuna para promoverlo. Hoy su cadáver yace bajo una lápida en New York que reza descanse en paz John D. Rockefeller III.
Son las misma fundaciones -Rockefeller, Ford, Gates, Open Socity, solo por citar algunas- las que invirtieron y siguen invirtiendo millones de dólares cada año para promover el aborto, sobre todo – ¡ojo! – en los países del llamado tercer mundo. A veces dicen que lo hacen por motivos de salud o de libertad, pero el fondo -todos lo sabemos y lo saben ellos mismos- lo hacen por un deseo de control. Solo en México, en los últimos años se han invertido más de 3,700 millones a la promoción del aborto.
El aborto se ha convertido en una vieja práctica, impuesta hace más de 70 años, en México y en el mundo a fuerza de publicidad y promoción y eso ha impedido al México de hoy, a los jueces, los políticos, los legisladores, los médicos y sobre todo a las mujeres, encontrar soluciones nuevas y creativas al problema que puede llegar a significar un embarazo inesperado.
Hoy celebramos a...