Cuando nos vamos de vacaciones, y más cuando tenemos niños, hay un sinfín de cosas para arreglar: la ropa, los juguetes, los documentos... No puede faltar algo rico para ir comiendo y tomando durante el viaje (principalmente cuando son varias horas de travesía).
Generalmente por practicidad paramos en alguna estación de gasolina que tenga tienda de alimentos y elegimos algunos no muy saludables que digamos. Nos arreglamos con unos refrescos, zumos, café, galletas, alfajores, bizcochos, papitas, golosinas y más.
Pero debemos saber que aunque estemos de vacaciones es importante seguir alimentándonos rico pero sano. Tenemos que comer de forma consciente y hacer elecciones que nos hagan bien a nuestro cuerpo.
Si ya comenzamos las vacaciones (o el viaje de fin de semana) comiendo comida malsana, no solo puede caernos mal sino que sentiremos pesadez o hinchazón abdominal, una molestia totalmente innecesaria.
Por eso lo ideal es tomarse unos minutos en casa para planificar los refrigerios inteligentes que vamos a llevar y así disfrutar de estas vacaciones tranquilos, sanos, y llenos de energía toda la familia.
Al momento de planificar las colaciones se debe tener en cuenta que sean ricos en proteínas, fibra y carbohidratos saludables, en vez de calorías vacías (alimentos que solo aportan calorías y ningún nutriente).
Opciones inteligentes para el viaje en familia
Para hidratarse lo ideal es el agua, puede ser con o sin gas, o saborizada sin azúcar (para ello se le puede agregar 1 o 2 rodajas de limón, lima o naranja).
En cambio, no se recomienda para los viajes las bebidas de cola o con cafeína, ya que al momento de llegar a destino quien lo tomara podría estar nervioso y tener problemas para dormir. Si se desea tomar algo refrescante antes de descansar, un té helado de menta, limón y pepino es una muy buena opción.
Así, no es necesario que en vacaciones tengamos que llenar la boca de alimentos que no son saludables, y dejar nuestros buenos hábitos alimentarios en casa, sino todo lo contrario, comer rico, probar platos nuevos y sanos.
Algunas recomendaciones:
Si se van de vacaciones a un balneario, es necesario buscar alimentos frescos, principalmente frutas y vegetales, porque la hidratación juega un papel fundamental con el calor. Así que no se olvide de tener al alcance siempre una hielera con agua fresca.
Si se van al extranjero, una idea es buscar con anticipación el restaurante al que se va a ir. De esta manera ya se puede conocer el menú que ofrece y hacer una mejor elección.
Además, es el mejor momento para conocer nuevas culturas y probar platos locales, y disfrutar de nuevos sabores.
Si es una visita a la casa de un familiar o amigo, es importante aclararles de principio el tipo de comida que prefieren o están acostumbrados a consumir. Explicarles que no es necesario ofrecerles comida chatarra y golosinas a los niños para hacer que los quieran o se sientan bien. Ellos pueden expresarle su cariño y calidez de muchas maneras por ejemplo leyéndoles un cuento, jugando con ellos, haciendo una salida juntos y mucho más.
Y por supuesto, no se olviden antes de salir de casa hacer esta linda oración en familia para que Dios les proteja y acompañe en su viaje:
Señor, Tú conoces todos los caminos y delante de Ti no hay secretos; nada está oculto a tus ojos y nada acontece sin tu permiso.
Concédeme la felicidad de iniciar este viaje acordándome de Ti y haciendo posible, mediante tu infinito amor y benevolencia, la ida y el retorno en paz y tranquilidad.
Que tu bondadoso apoyo me acompañe y dirija mis pasos y destino con el eterno amor de tu corazón, teniéndome siempre cerca de Ti, Señor.
Hazme ver claramente los obstáculos y dificultades y ayúdame a encontrar soluciones. Que esté a salvo de aflicciones y cóleras, gracias a tu paz y bendición.
Bendito seas, oh Dios eterno, Padre nuestro, que me conservaste la vida y me dotaste para que, con la luz de tu presencia, encuentre nuevos caminos y respuesta a mis anhelos.
Amén.