Nunca un vuelo a Miami pudo tener una sorpresa tan agradable. El pasado 28 de abril, un médico y un equipo de profesionales especializados en medicina neonatal hicieron posible el nacimiento de un bebé prematuro en pleno vuelo.
Se trata de un avión de la compañía Delta Airlines que volaba de Salt Lake City a Honolulu (Hawai, Estados Unidos). Lavinia “Lavi” Mounga, una pasajera de Utah, viajaba en el vuelo para disfrutar de unas vacaciones familiares.
Sin embargo, el parto se avanzó y allí mismo, en el avión, Lavi dio a luz a su hijo, Raymond, con apenas 29 semanas de gestación.
Pero el doctor Dale Glenn, médico de medicina familiar del Hawaii Pacific Health, se encontraba en ese mismo vuelo. También estaban a bordo Lani Bamfield, Amanda Beeding y Mimi Ho, enfermeras de la unidad de cuidados intensivos neonatales del North Kansas City Hospital.
Una llamada de emergencia y el equipo se puso en marcha
“Aproximadamente en mitad del vuelo, que duraba una hora, se realizó una llamada de emergencia. Ya he experimentado esto antes y, por lo general, son bastante claros al preguntar si hay un médico a bordo”, dijo Glenn en un comunicado de prensa de Hawaii Pacific Health. “Sin embargo, esta llamada no fue exactamente así, sino que era urgente”.
Bamfield explicó que escuchó a alguien pedir ayuda médica y vio lo pequeño que era el bebé.
Acto seguido, las tres enfermeras y el médico actuaron como si estuvieran en un paritorio de hospital, echando mano de lo que encontraron.
Usaron cordones de zapatos
Así pues, emplearon cordones de zapatos y un reloj inteligente.
Sin contar con equipo especial para un bebé prematuro, usaron cordones de zapatos para cortar y atar el cordón umbilical y utilizaron un reloj inteligente para medir la frecuencia cardíaca del bebé.
“Todos intentamos trabajar en un espacio muy pequeño y confinado en un avión, lo cual es todo un desafío. Pero el trabajo en equipo fue genial”, declaró Glenn.
El bebé prematuro se hizo viral en Tik Tok
Julia Hansen, que se encontraba en el vuelo, hizo un vídeo en TikTok que se volvió viral y ya lleva más de 12 millones de visitas. Hansen explicó a The Washington Post que la situación inicialmente causó conmoción, pero otros pasajeros actuaron con total normalidad al final del vuelo.