Tu vida es un misterio maravilloso, respétate y acepta el fuerte abrazo de Dios a su persona más amada
Soy libre para elegir lo bello o lo feo, lo fácil o lo difícil, lo agradable o lo desagradable. Elijo lo que me hace bien o lo que es tóxico para mi alma. Elijo…
escuchar al que me hiere o cerrar mis oídos a sus injuria,
subir el monte o recorrer el desierto,
nadar en el río o cruzar el mar,
contemplar muy quedo un atardecer o despertar mirando un amanecer,
la compañía de mis seres queridos o abrazo la soledad, con el dolor que conlleva…
Yo elijo cómo quiero vivir. Respondiendo a lo que los demás esperan de mí y renunciando a lo que soy para agradar a otros. O decido ser yo mismo con todo lo que eso implica.
Está en mi mano tomar lo que me hace feliz o dejarlo a un lado por miedo, por mi estado de ánimo, o porque no soy capaz de gobernar mi vida.
Depende de mí
Elijo los sueños que se pueden cumplir y también los otros, los imposibles, porque me alegran el alma. Recorro el mundo entero para abrazar un instante de paz en medio de mis problemas.
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