El Vaticano informó que la campaña de vacunación dentro de las murallas leoninas comenzará después del 15 de enero. Se planificará “según los criterios de selección de las categorías más expuestas a la infección y según las adhesiones voluntarias”.
El papa Francisco, 84 años de edad, como persona mayor, estaría en la categoría de personas a las cuales se suministraría primero la vacuna dentro del Vaticano.
También lo sería, por motivos de registro, el papa emérito Benedicto XVI, de 94 años de edad. El Pontífice emérito mantiene un auto-aislamiento preventivo, connatural a su estilo de vida, elegido desde su renuncia, en el monasterio Mater Ecclesiae dentro de los jardines vaticanos.
¿Quiénes tendrán prioridad?
La Dirección de Salud e Higiene de la Gobernación del Vaticano también dará prioridad al personal de salud, de seguridad pública y al personal más frecuentemente en contacto con el público. En ese caso, los Guardias Suizos y la Gendarmería, por ejemplo.
La Santa Sede no ha dado información sobre si Francisco haría su vacunación en público, como han hecho otros líderes mundiales. Sobre todo, dado que la Congregación para la Doctrina de la Fe definió «moralmente aceptable» las vacunaciones anti-Covid.
“Las dosis serán administradas en el atrio del Aula Pablo VI, por personal médico y de enfermería calificado”, siempre en “línea con las recomendaciones de salud para la pandemia”.
El Vaticano compró un “refrigerador de temperatura ultrabaja” para almacenar las dosis de la vacuna. Algunas fuentes periodísticas hablan de 10.000 dosis.
En total, el territorio de la Santa Sede cuenta con unos 800 residentes, si bien los empleados que trabajan en alguno de los organismos de su jurisdicción suman cerca de 3000.
Cardenal Krajewski salió del hospital
Antes del 24 de diciembre, el Papa había realizado el examen para detectar el coronavirus luego de que resultaran positivos dos cardenales muy cercanos al pontífice: el Limosnero pontificio Konrad Krajewski, 57 años, y el presidente de la gobernación Giuseppe Bertello, 78 años.
Por lo pronto, el cardenal Konrad Krajewski, hospitalizado durante 11 días en la clínica Gemeli de Roma debido a una infección por coronavirus, salió del hospital el 1 de enero y regresó a su casa. Está mejor, pero sigue siendo positivo; por ende, se encuentra aislado, mientas se recupera en su casa.
Hay otros miembros del Colegio Cardenalicio que han dado igualmente positivo a la prueba del coronavirus en las últimas semanas, como Francesco Montenegro, arzobispo de Agrigento y Matteo Zuppi, arzobispo de Bolonia.
Casos dentro del Vaticano
Existe una prudente aprensión por la salud del líder de la Iglesia Católica, pero que no significa que haya algún motivo en particular de alarma, hasta el momento.
Francisco que plantea realizar su primer viaje apostólico a Iraq en marzo de 2021, no participó en las misas del 31 de diciembre y el 1 de enero debido una “dolorosa ciática”.
Asimismo, tuvo que celebrar los ritos de Navidad y fin de añode puertas para adentro y sin público, “como en una jaula”, palabras de Francisco usadas para definir su primer confinamiento en marzo por la pandemia.
Ahora, los Ángelus en la Biblioteca son la norma en la agenda papal. Esto para evitar muchedumbres y riesgos de contagio.
Desde el primer foco de contagio en febrero, en el Vaticano se han detectado decenas de casos, en especial entre la Guardia Suiza Pontificia que tiene contacto a diario con el público y los visitantes.
En Italia ya han sido vacunadas 320 mil personas, pero el país ha sido declarado zona naranja por sus autoridades sanitarias.Italia ha registrado más de 15.000 nuevos casos y cerca de 650 muertos en las últimas 24 horas.
Hoy celebramos a...