Una imagen muy común de María y José viajando a Belén muestra a una María embarazada montada en un burro, mientras que José hace el camino a pie.
¿Es esta una representación auténtica de lo que realmente sucedió? ¿María viajó montada en burro?
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El evangelio omite esos detalles, ya que todos en el momento en que se compuso todos sabían cómo viajaba la gente.
“Y cada uno iba a inscribirse a su ciudad de origen. José, que pertenecía a la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se dirigió a Belén de Judea, la ciudad de David, para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada. Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser madre; y María dio a luz a su Hijo primogénito” (Lucas 2, 3-7)
No se menciona a ningún burro, camello o cualquier otro medio de transporte.
Dónde se originó la tradición del burro
Una de las principales razones por las que se asocia un burro con la historia de Navidad es el Protoevangelio de Santiago, un antiguo relato no bíblico de la vida de María que se remonta al siglo II.
“Y llegó un edicto del emperador Augusto, que ordenaba se empadronasen todos los habitantes de Bethlehem de Judea. Y José dijo: Voy a inscribir a mis hijos. Pero ¿qué haré con esta muchacha? ¿Cómo la inscribiré? ¿Como mi esposa? Me avergonzaría de ello. ¿Como mi hija? Pero todos los hijos de Israel saben que no lo es. El día del Señor será como quiera el Señor. Y ensilló su burra, y puso sobre ella a María, y su hijo llevaba la bestia por el ronzal, y José los seguía”.
Esta historia del nacimiento de Jesús muestra a san José como un anciano que tiene hijos de un matrimonio anterior. La escena tiene a María sentada en un burro, dirigida por el hijo de José.
Es posible que san José condujera a María a Belén en un burro. Esta era una forma común de viajar en ese momento y los burros eran populares entre todas las clases de personas.
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Posiblemente una caravana
Sin embargo, la mayoría de los eruditos bíblicos modernos dicen que es más probable que la Sagrada Familia viajara en una caravana de personas.
Chris Mueller en un artículo para Ascension Press pinta una imagen muy diferente:
María y José no fueron los únicos que hicieron el viaje. Lo más probable es que las rutas entre ciudades estuvieran abarrotadas de viajeros. Nadie consideraría hacer un viaje como este solo. No habría sido seguro, ya que el territorio entre las ciudades no estaba vigilado y los bandidos habrían sido una preocupación real. La gente probablemente viajaba en grandes caravanas por conveniencia y seguridad. María y José habrían estado entre la vasta migración de personas. Debió de ser un espectáculo increíble de ver.
Esta observación también se hace en un artículo publicado en Los Angeles Times.
Y “bandidos, piratas del desierto y ladrones” también eran peligros comunes a lo largo de las principales rutas comerciales como la que hubieran recorrido José y María, dijo el reverendo Peter Vasko, sacerdote católico y director de la Fundación Tierra Santa … La amenaza de los forajidos a menudo obligaba a los viajeros solitarios a unirse a las caravanas comerciales para protegerse.
Puede que nunca sepamos el medio de transporte exacto que utilizaron José y María, pero sabemos que las posibilidades son muchas. Podrían haber usado un burro, caminar hasta allí a pie o viajar con otros en una caravana.
Sea lo que fuere, el camino fue arduo y su viaje nos anima a seguir nuestro propio camino espiritual hacia la fiesta de Navidad.
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