Un deporte en plena naturaleza. Niños y adultos pueden realizar carreras de orientación. Los beneficios son muchos. Si te gustan las excursiones seguro que te animarás a iniciarte junto con los tuyos en este deporte en plena naturaleza: las carreras de orientación.
Lo cierto es que nuestros hábitos de vida en ocasiones priorizan las actividades sedentarias que no favorecen nuestro desarrollo físico ni emocional. Sin embargo, son las salidas al campo una de las tendencias que está generando esta pandemia. ¡Algo bueno podemos encontrar a estos tiempos tan difíciles que nos han tocado vivir!
Y es que son muchos los que estos días de pandemia están volviendo a la naturaleza para disfrutar del fin de semana y vacaciones realizando actividades al aire libre. Y si es en familia, mucho mejor.
Vamos a hablar de una actividad que podemos practicar toda la vida, niños y mayores, de forma individual o con familiares y amigos. Nos permite disfrutar de la naturaleza haciendo deporte y aporta cierto nivel intelectual y educativo. Si no lo conocen aún, se llama orientación. Y su lema es “Piensa y corre”.
En realidad, pocas actividades son tan completas como la orientación y, sin duda, es muy indicado para iniciar a los niños en el mundo del deporte y la naturaleza, además de ser una excelente escuela al aire libre.
Así mismo, ese tiempo al aire libre es importante para que los niños y los mayores reconozcan a Dios sus vidas y en la vida de la naturaleza que les rodea. Y es que la naturaleza es el antídoto contra los aspectos negativos de la cultura que hemos creado y que vivimos.
Ya lo señaló el Papa Francisco en 2015, cuando dedicó una Encíclica completa a este tema, “Laudato Si” donde analiza el importante del cuidado de nuestra Tierra, nuestra casa común:
“Vivir la vocación de ser protectores de la obra de Dios es parte esencial de una existencia virtuosa, no consiste en algo opcional ni en un aspecto secundario de la experiencia cristiana”.
Tenemos que vivir momentos de observación, contemplación y cuidado y estas carreras ofrecen ocasiones para ello.
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Beneficios de las carreras de orientación
Básicamente la orientación consiste en encontrar, en el menor tiempo posible, una serie de balizas dispuestas sobre un área determinada, habitualmente en un entorno natural, utilizando únicamente un mapa y una brújula.
De esta forma es una actividad que une la actividad física con la mental, y se puede realizar individualmente o en grupo.
Además, existen variedad de categorías y modalidades, como en bicicleta, con esquís o incluso en kayak, que sin duda lo convierten en un deporte ideal para toda la familia.
La orientación se puede comenzar a practicar a partir de los 4-5 años, siempre que los niños vayan acompañados por el resto de la familia y, más tarde, de forma progresiva, se les puede ir dando un papel más protagonista a la hora de tomar las decisiones.
Sin duda la práctica de pruebas de orientación repercute positivamente a nivel físico, cognitivo, emocional y social en quien las realiza.
En primer lugar, fomenta el desarrollo psicomotriz de los niños, pero además ejercita en ellos la percepción espacial y su capacidad para enfrentarse y resolver problemas en el mínimo tiempo.
Por esta razón desarrolla la independencia, superación, paciencia o autoestima de los pequeños.
Del mismo modo, implica concentrarse y esforzarse, superarse y solucionar sobre la marcha contratiempos y problemas. Y siempre con la familia, que realiza un acompañamiento.
Todo esto redunda en un proceso de maduración personal y crecimiento muy positivo. De hecho, en los países escandinavos, donde se originó este deporte, la orientación forma parte de su modelo educativo y en muchos países se va introduciendo en los currículos educativos.
Respecto a los beneficios a nivel social, las carreras de orientación potencian entre los adultos, y también entre los niños, una sana competitividad y el trabajo en equipo.
En ocasiones su práctica ayuda a desconectar del estrés diario, se liman asperezas y se solucionan los típicos problemas del día a día laboral.
Por último, se fomenta la comunicación y la integración entre los miembros del equipo.
Y todavía hay más
¿Y qué más puede aportarnos el deporte de la orientación?
Si aún no estás convencido del todo, te enumero más ventajas:
Trabaja la capacidad de observación, no sólo de los mapas y balizas que debemos encontrar, sino del recorrido en sí. La investigación y curiosidad por el medio natural, convierte en mucho más provechosa e instructiva una excursión a la montaña.
Nos ayuda a prescindir voluntariamente de la tecnología y de las comodidades cotidianas durante unas horas, y nos pone a prueba aprendiendo a usar una brújula para orientarnos sin GPS e interpretando un mapa topográfico.
Es una actividad muy divertida y llena de retos y expectativas.
No requiere de material ni de infraestructuras costosas.
En definitiva, mediante nuestra manera de vivir, el cómo y el qué hacemos y deshacemos, debemos fomentar una cultura de cuidado del medio ambiente.
Recordemos el modelo de san Francisco de Asís, en el que una sana relación con lo creado habla de la conversión íntegra de la persona. Como escribió el santo en su Cántico de las Criaturas:
Alabado seas, mi Señor, por la hermana nuestra madre tierra, la cual nos sustenta, y gobierna y produce diversos frutos con coloridas flores y hierbas”.
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