Audiencia a las delegaciones de los donantes del árbol de Navidad y del belén en la Plaza de San PedroEl Papa Francisco dijo que el árbol de Navidad y el belén nunca como este año son signo de esperanza al recibir en audiencia este viernes, 11 de diciembre en la mañana, en el Palacio Apostólico Vaticano, a las delegaciones de Castelli in Abruzzo (Italia) y del municipio de Kočevje, en el sudeste de Eslovenia, con motivo de la entrega del árbol de Navidad y del belén montado en la plaza de San Pedro.
Precisamente, esta tarde (17:00 hora local) se inaugurarán estos dos “iconos” de la Navidad. Por ello, el Papa sostuvo: “Nunca como este año son un signo de esperanza para los romanos y para los peregrinos que tendrán la oportunidad de venir a admirarlos”.
Significado del árbol y el belén
“El árbol y el belén contribuyen a crear una atmósfera navideña favorable para vivir con fe el misterio del nacimiento del Redentor. En el belén, todo habla de la pobreza “buena”, la pobreza evangélica, que nos hace bienaventurados: cuando contemplamos a la Sagrada Familia y a los diversos personajes, nos atrae su desarmante humildad.
Nuestra Señora y San José fueron desde Nazaret hasta Belén. No hay lugar para ellos, ni siquiera un cuartito (cf. Lc 2,7); María escucha, observa y guarda todo en su corazón (cf. Lc 2,19.51). José busca un lugar para ella y el niño que está a punto de nacer. Los pastores son protagonistas en el belén, como en el Evangelio. Viven al aire libre. Están en vela. El anuncio de los ángeles es para ellos, y van inmediatamente a buscar al Salvador que ha nacido (cf. Lc 2,8-16)”.
La Navidad nos recuerda a Jesús y su paz
En su discurso el Papa recordó que la Navidad nos recuerda que Jesús es nuestra paz, nuestra alegría, nuestra fuerza, nuestro consuelo.
Pero, afirmó, para acoger estos dones de gracia, necesitamos sentirnos pequeños, pobres y humildes como los personajes del belén.
También esta Navidad, en medio del sufrimiento de la pandemia, Jesús, pequeño e indefenso, es el “Signo” que Dios da al mundo (cf. Lc 2,12). Signo admirable, como empieza la Carta sobre el belén que firmé hace un año en Greccio. Nos hará bien volver a leerla en estos días.
Por ultimo, Francisco agradeció a los patrocinadores, donadores y a quienes han contribuido al transporte y al montaje del árbol y el belén en la Plaza de San Pedro. “El Señor les recompense por su disponibilidad y generosidad. “¡Feliz Navidad! Gracias”.