Cuando las personas olvidan o desconocen a los ángeles -decía el arzobispo norteamericano Fulton Sheen- creen en los superhéroes.
Esos seres que son inmunes a las balas, dotados de superpoderes, vienen a sustituir o tratar de llenar el vacío dejado por los ángeles.
Esta visión de Fulton Sheen, parece no lejana de la realidad, y muestra algo que hay en el espíritu de todo hombre: la unión, la amistad y la necesidad de alguien que esté a su lado protegiéndolo, defendiéndolo, haciendo las veces de hermano mayor.
Los ángeles cuidan a todos
Muchas veces vemos estampitas de ángeles cuidando niños, o estampitas de ángeles con aspecto infantil; pocas veces vemos a un ángel protegiendo a un adulto.
Y esto puede llevar a que, en el imaginario colectivo, se dé la idea de que los ángeles son cosa de niños, una devoción infantil.
Pues bien, conozcamos el poder de estas criaturas espirituales que Dios mismo nos ha puesto a nuestro lado.
Ayuda angelical de acuerdo a las necesidades
En este sentido cabe el siguiente principio: la extensión de la ayuda que prestan los ángeles se ha de medir por la amplitud de las necesidades.
Recordemos que cada persona tiene un ángel custodio (cfr. Catecismo 336); sin embargo, por el encargo o responsabilidad que algunas personas tienen sobre otras, Dios les asigna más de un ángel, para ayudarles en el correcto cumplimiento de su misión.
Santa Verónica Giuliani (1660-1727), por ejemplo, tuvo una visión donde se le presentaba el alma de un Papa por el que la santa oró, y este Papa estaba rodeado de 7 ángeles.
Este testimonio es concorde con la tradición de la Iglesia, que enseña que una persona con tareas de responsabilidad puede tener un ángel de la guarda y otros ángeles que le ayuden en su tarea.
Poder contra el mal
El poder del ángel de la guarda es grande, y se extiende, de acuerdo a santo Tomás de Aquino, al mismo anticristo.
Este enemigo de la Iglesia, de acuerdo al pensamiento de Tomás de Aquino, gozará de la protección y ayuda de un ángel protector, que lo guiará, e incluso le impedirá cometer los actos que, en su maldad y odio hacia la Iglesia, desearía.
En este sentido, Pascal da el ejemplo del "granito de arena" de Oliver Cromwell (1599-1658), líder político y militar inglés, quien en su odio contra los católicos llegó a asesinar a miles de personas en Irlanda y Escocia.
Sin embargo, repentinamente, murió víctima de un cálculo renal. Y Pascal atribuye esto a la acción de los ángeles, que pusieron "el granito de arena".
Poder sobre la materia
Igualmente los ángeles tienen poder sobre la creación material.
Santo Tomás de Aquino afirma que los ángeles conocen, incomparablemente mejor que el hombre, el mundo material y sus leyes; y ejercen sobre la materia un designio misterioso.
Este poder de los ángeles sobre la materia, es tan asombroso que ante nuestros ojos parecería milagroso, pero que resulta como algo natural para estas criaturas espirituales.
Respecto a la actuación de los ángeles sobre la creación material, encontramos varios testimonios.
Por ejemplo, en el libro de Daniel 6,23 se lee que el profeta fue salvado de las fauces de los leones: "Mi Dios ha enviado a su ángel, que ha cerrado la boca de los leones y no me han hecho ningún mal, porque he sido hallado inocente ante él".
Esta protección de los ángeles se narra en el Salmo 91,10-13, al decir que los elegidos de Dios pasarán indemnes sobre víboras y leones.
Dios mismo nos envía a sus ángeles para protegernos en nuestros caminos, y Él es fiel, por ello, su autor cree que Dios se compromete a rodear los suyos con una protección angelical.
Poner en duda la protección y ayuda de los ángeles, es poner en duda la palabra de Dios, y vendría a ser un tipo de blasfemia.
La acción de los ángeles abarca el aspecto físico
Por ejemplo, al sacerdote, de origen argentino, Adolfo Granillo Ocampo, víctima de un robo en el barrio Liniers, cerca de del Instituto Nuestra Señora de las Nieves, en Ventura Bosch, su ángel lo protegió hasta tal punto que los ladrones le devolvieron los objetos robados y se fueron. El mismo sacerdote lo atribuyó a su ángel de la guarda.
Poder sobre la mente
Igualmente, el ángel puede intervenir en el terreno psíquico, por ejemplo, inspirándonos; actúan sobre nuestra imaginación, nuestra memoria y sobre nuestra sensibilidad.
Recordemos a santa Juana de Arco (1431) y cómo san Miguel Arcángel, mediante visiones, la llevó a defender Francia de la invasión inglesa.
Respecto a esto, vale la pena hacer la aclaración: los ángeles no pueden intervenir sobre nuestra libertad ni sobre nuestra voluntad.
También pueden actuar ante un enemigo, distrayéndolo o impidiendo sus movimientos.
Sin embargo, santo Tomás de Aquino menciona que lo mejor de los ángeles se centra en iluminar las conciencias.
Todo lo anterior tiene un gran sentido práctico para nuestras vidas. Podemos recurrir a ellos para que nos ayuden en toda situación, nos iluminen en los asuntos que tenemos por resolver, nos protejan de enemigos visibles e invisibles.
Por ello, descubramos esta verdad experimentando su poder, su ayuda y amistad.