140 personas fallecieron esta semana en la costa senegalesa cuando intentaban llegar a las Islas Canarias. En la embarcación iban 200 personas, pero sólo pudieron ser rescatadas 59, gracias a la colaboración de barcos oficiales de Senegal y España y de pescadores de la zona.
No se trata de un hecho aislado, sino de un grave problema al que Canarias comienza a enfrentarse. Ya hay quien afirma que las islas españolas pueden convertirse en la nueva Lampedusa. Se trata de una ruta migratoria que había dejado de utilizarse por la mafias y ahora han vuelto a reactivarla.
En 2019 llegaron a las Islas Canarias en cayuco 2.557 personas. En 2020, en lo que llevamos de año, ya han llegado más de 11.000, con 414 personas fallecidas tras naufragios en esta ruta.
Hacinados y en condiciones infrahumanas
La Red Migrantes con Derechos en Canarias, que engloba entre otros a Caritas Canarias, se encuentra preocupada por “la indiferencia de nuestra sociedad ante los acontecimientos referidos a las personas migrantes que han llegado en las últimas semanas a nuestras islas, que son hacinados en condiciones infrahumanas”.
Mediante un comunicado explican la “gestión ineficaz de la acogida humanitaria” que ha tenido su visión más clara en las condiciones de las personas migrantes en el Muelle de Arguineguín. Allí llegan a pasar la noche más de 1.200 personas : “Es inaceptable e indignante que las personas migrantes permanezcan retenidas en lugares absolutamente inapropiados, que ponen en peligro su salud”.
Desde Migrantes con derechos se pide, Primero: “La puesta en marcha un sistema de acogida digna y eficaz, respetuoso con los derechos humanos y dotado de medios suficientes y proporcionales al número de personas que lo necesiten”. Segundo: Una mejor coordinación de todas las administraciones. Tercero: El “cumplimiento de los protocolos de identificación de posibles menores que llegan a nuestras islas procedentes de países en guerra o conflicto armado”.
Finalmente se pide a la ciudadanía un papel importante, que “no se caiga en la indiferencia y el silencio cómplice con la realidad de exclusión social de las personas migrantes y que legitima la “cultura del descarte”.
Hoy celebramos a...