Seguramente más de uno recordará ese aroma tan particular del arroz con leche, aquel que alguna vez comimos en la casa de nuestras abuelas y preparaba con mucha paciencia y amor. Un postre sencillo, de pocos ingredientes, pero delicioso.
Me gustó mucho para compartirles la receta realizada por el Fray Ángel Serrano, cocinero del Monasterio Franciscano del Santo Espíritu de Gilet (Valencia- España), que cocina a diario para 8 franciscanos.
Gran parte de sus preparaciones están inspiradas en el Fray Altamiras, el creador del primer recetario de comida popular española.
Dice que lo utiliza porque piensa que se adapta perfectamente a estos tiempos de pandemia que estamos viviendo, ya que son platos económicos, cercanos a la gente, respetuosos con el medio ambiente, y nutritivos.
Cocinar no solo es importante para alimentar nuestro cuerpo sino también nuestro espíritu. A través de la gastronomía podemos transmitir valores, enseñarles a nuestros hijos, el respeto por el alimento, a cómo cuidarlo, su valor nutricional, a prepararlo con amor, paciencia.
Sobre esto el Fray Ángel al cocinar sus recetas nos dice que debemos cocinar cuidando los alimentos, porque son los que Dios nos regala cada día, sin desperdiciar nada, cuidando nuestra tierra, y con austeridad.
Como nutricionista agrego, además, que es fundamental elegir adecuadamente nuestros alimentos, saludables, de temporada y nutritivos para ayudarnos a mantenernos sanos.
En esta ocasión, para realizar este delicioso arroz con leche, Fray Ángel, tomó inspiración en el libro “Cocina Monacal”, editado en los años 90 y que recoge los secretos culinarios de siete conventos españoles de las Hermanas Clarisas. Esta receta es una adaptación de la del Monasterio de la Santísima Trinidad de Oñati, en Guipuzcoa (España).
Ingredientes:
- 300 gramos de arroz
- 3 litros de leche
- 600 gramos de azúcar
- Canela en rama y molida
Preparación:
- Poner a hervir en una cacerola grande, la leche fría y arroz a fuego bajo. Ir revolviendo durante una hora aproximadamente.
- Cuando empiece a hervir se le pone una rama de canela.
- Luego, tras remover durante, 1 hora – 1 hora y media, se retira la rama de canela y se agrega el azúcar e ir revolviendo un ratito más. Importante no dejar que se pegue, ni que quede muy seco.
- Al momento de servir ya sea frío o caliente, colocar en recipientes individuales y espolvorear con un poco de canela en polvo.
- Es una preparación que se puede conservar perfectamente en el refrigerador por unos días.
Y sí quieres conocer más recetas del Fray Ángel, puedes hacerlo en su canal de youtube todos los lunes. Este canal lo creó para dar a conocer su cocina basada en la austeridad, adaptada a la situación de crisis que vivimos, pero siempre nutritiva y de calidad nutricional.
Ahora sí te invito a preparar este sencillo y exquisito postre para comer juntos este Domingo en familia, porque como dice el Papa Francisco:
“Compartir la comida es un momento para el prójimo. Es fuente de relación. Es hospitalidad. Y es escuchar a los que te rodean. Comer juntos es una acción muy evocadora y simbólica”.
Palabras expresadas del libro: En la Mesa con Francisco. Los alimentos y las recetas en la vida del Papa. De Roberto Alborghetti-
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