Es un ícono para los católicos en Ecuador y no podía quedar fuera de los festejos de los 200 años de la independencia de Guayaquil. Se trata de la catedral metropolitana San Pedro Apóstol, uno de los sitios elegidos para una verdadera instancia de júbilo transformada en festival de luces.
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A través de la técnica de iluminación conocida como “mapping” fue posible que la fachada del emblemático templo se viera como nunca antes: llena de imágenes sobre diversos acontecimientos y hasta personajes bíblicos, tal cual recuerda la Arquidiócesis de Guayaquil en su sitio web.
El evento, que tuvo una hora de duración el pasado 11 de octubre, también fue acompañado por una orquesta.
Si bien hubo poca gente que pudo estar presente alrededor de la catedral, debido a la pandemia del coronavirus, la gran mayoría pudo vivenciar este momento único de manera virtual.
A continuación algunas imágenes de la fiesta de luces: