Les ayuda a ver su dignidad personal y a obtener nuevas y mejores perspectivas de vidaEl padre Mathieu Dauchez es francés pero trabaja en Manila, Filipinas, como director de la fundación ANAK-TNK, que se dedica a los niños necesitados en una de las zonas más pobres de la capital del país.
La fundación acoge a niños que viven abandonados en la calle y niñas obligadas a prostituirse. El cura y los voluntarios llegan a buscarlos en los vertederos, donde intentan encontrar algo para comer. Es común que estos niños sean víctimas de las drogas y el crimen si no se les ayuda.
ANAK-TNK les ayuda a tomar conciencia de su dignidad como personas, como hijos de Dios, y a obtener nuevas y mejores perspectivas de vida.
La vida de oración es fundamental en el proyecto. El nombre de la fundación significa “hijo” (anak) y “puente para la infancia” (tnk es la abreviatura de “tulay ng kabataa” en el idioma tagalo, el más hablado en Filipinas).
El trabajo del padre Mathieu se destacó, además de por la visita del papa Francisco a una de sus casas en Manila, por un tuit que el padre Patxi Bronchalo, de la diócesis española de Getafe, viralizó en 2008:
Esto es lo que nunca sale en los medios… Impresionante la labor de este sacerdote, recogiendo niños de los basureros y bandas de Manila.
Vídeo: https://t.co/J5TottEtJ5
¿Por favor, me ayudais con un RT para darlo a conocer, amigos? Muchas gracias. pic.twitter.com/uSInPGZBeL
— Patxi Bronchalo ن (@PatxiBronchalo) October 9, 2018