En el aula Pablo VI, en la primera audiencia multitudinaria en la pandemia, sin contar las audiencias generales, el papa Francisco saludó el 28 de septiembre de 2020 a los miembros de la Policía italiana que lo protegen en el Vaticano y en Roma, acompañados por sus familias.
“Queridos funcionarios y agentes, muchas gracias por vuestro valioso servicio, caracterizado por la diligencia, la profesionalidad y el espíritu de sacrificio”, dijo Francisco.
Y agradeció a los policías italianos que se encargan de acompañarlo cuando se desplaza por Roma y cuando visita diócesis o comunidades en Italia.
“Admiro, sobre todo, vuestra paciencia para tratar con gente de diferentes orígenes y culturas y, -me atrevo a decir-, para tratar con los sacerdotes“, dijo el Papa causando las risas de los presentes.
Discreción y equilibrio para la seguridad en el Vaticano
El encuentro se celebró con ocasión del 75 aniversario de la institución de la Inspección de Seguridad Pública Vaticana.
Les agradeció también por una “tarea difícil, que requiere discreción y equilibrio, para que los itinerarios del Papa no pierdan su carácter específico de encuentro con el Pueblo de Dios. Por todo esto, una vez más os estoy agradecido”.
La Inspección de Seguridad Pública Vaticana fue fundada en marzo de 1945.
El personal de policía también es responsable de garantizar la seguridad diaria de los miles de italianos y extranjeros que acuden a la Plaza de San Pedro por turismo o por fe.
Francisco los encomendó: “Que el Señor os recompense como sólo Él sabe hacer. Que vuestro patrón san Miguel Arcángel os proteja y que la Virgen Santa vele por vosotros y vuestras familias. Y que también os acompañe mi bendición. Y por favor no os olvidéis de rezar por mí. Gracias”.