En la Diócesis de Loja (Ecuador) hay congoja por estas horas. Es que en apenas dos días murieron dos reconocidos sacerdotes. Se trata de Celso Tacuari (72) y Armando Jiménez (52).
Según informan medios locales comoEl Comercio, ambos permanecieron varios días internados en la clínica San Agustín. Y lo que más genera conmoción en cuanto a la pérdida es la calidad humana de ambos sacerdotes.
En el caso de Tacuari, cuya causa de muerte está asociada a una neumonía, se destaca su espíritu jovial y por estar siempre con una sonrisa, además de algún mensaje de aliento. Por otro lado, se recuerda que desde el inicio de su vocación trabajó con poblaciones vulnerables fronterizas.
En cuanto a Jiménez, que por mucho tiempo se mantuvo como rector del Santuario El Cisne, hace 10 años había sido diagnosticado por una leucemia y debido a la pandemia del coronavirus su tratamiento tuvo alternaciones, algo que terminó afectando del todo su salud.
A Jiménez también se lo recuerda con mucho cariño, por su sencillez y humildad. En particular por ser uno de los grandes caminantes de la famosa peregrinación de los más de 70 kilómetros desde el santuario hasta la ciudad de Loja (instancia que suele celebrarse en agosto y se caracteriza por ser una de las más grandes de América).
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A continuación algunos mensajes de las últimas horas:
De esta manera, la Diócesis de Loja ha emitido notas con el pesar para las familias y en referencia a estos fallecimientos. Pero como señal de esperanza una vez más aparece la imagen de la Virgen del Cisne, o simplemente “La Churonita”, abrazando el dolor de la comunidad, pero también acogiendo en su seno a sus hijos.
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