Este 30 de julio Brasil registraba más de 90.000 casos de personas fallecidas por coronavirus. Pero al ritmo vertiginoso que se ha movido la pandemia en el país epicentro de América Latina, desde que se anunció su presencia de manera oficial el 26 de febrero de 2020, la dura cifra de 100.000 personas muertas es cuestión de horas.
Es que Brasil, el gigante sudamericano que incluso ha tenido a su presidente, Jair Bolsonaro, con la enfermedad, el número de personas que ha tenido el virus ya ha superado los 2.5 millones (al menos de manera oficial) y es en este contexto –como no podía ser de otra manera- que el corazón de la Iglesia también se ha visto sacudido.
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Este 28 de julio, la Comisión Nacional de Presbíteros (CNP), que está vinculada a la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), ha realizado una actualización con los sacerdotes que se han contagiado con coronavirus. Del informe se desprende que hay 368 sacerdotes diocesanos contagiados, siendo 21 las muertes provocadas por complicaciones con la COVID-19.
Los estados de Pará y Amapá, vinculados a la Amazonía, son los que más contabilizaban infecciones de sacerdotes (58) y un número de fallecidos de 6.
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En segundo lugar, en cuanto a más infectados, prosigue el informe, se encuentra la denominada región Nordeste que abarca estados de Río Grande del Norte, Paraíba, Pernambuco e Alagoas. En estos lugares fueron contabilizados 57 infectados y 3 fallecidos.
La región sur, que alberga el estado de San Pablo (uno de los sitios más afectados en Brasil y epicentro local) está en tercer lugar en relación con sacerdotes infectados (38) y con el registro de una persona fallecido.
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Mientras que el Estado de Ceará, en la región Nordeste 1, se ubica en cuarto lugar de la lista con 37 sacerdotes infectados y un número de fallecidos de 4. En quinto lugar aparecen los estados de Bahía y Sergipe (región Nordeste 3) con 20 sacerdotes infectados y hasta el momento ninguna muerte confirmada.
En tanto, también se informa que de las 18 conferencias, solamente en la regional Oeste 1, Mato Grosso do Sul, no se han registrado sacerdotes infectados.
También obispos
La muerte de Henrique Soares da Costa ha generado fuerte conmoción en Brasil, tal cual informó Aleteia. Se trata del obispo de Palmares, uno de los más queridos del país (puedes recordar su vida y obra a continuación).
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Este hombre forma parte de la lista más escueta de obispos infectados y fallecidos en Brasil. Según este reporte, hasta el 20 de julio eran nueve los obispos positivos con COVID-19, siendo dos los que murieron.
Es por todo esto que una vez más vale la pena volver la mirada –tal cual recomendó el papa Francisco– a la Virgen de Aparecida, patrona de Brasil, y poner en sus manos la vida de estos sacerdotes, obispos, así como la de todos los afectados por la pandemia en un país que es sinónimo de color y alegría. ¡Qué Cristo Redentor también vuelva a iluminar pronto todos los rostros!
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