Las redes sociales del país claman por una apertura de causa de canonización
La repercusión de la muerte de Henrique Soares da Costa, obispo de Palmares, en las redes sociales ha sido inmensa, lo que no es sorprendente para quienes conocieron el trabajo sólido y profundo de uno de los obispos más queridos de Brasil.
El hermano de Henrique, el abogado Adriano Soares da Costa, había estado informando regularmente a los fieles sobre la situación de salud del obispo, quien murió el sábado 18 de julio por la noche, a la edad de 57 años, a causa del covid-19.
En uno de los comunicados más recientes, Adriano repitió, en video, las palabras que su hermano obispo había dicho sobre sus propias condiciones:
“‘La carne es débil, pero el espíritu permanece fuerte; Estoy en manos de Dios; Soy suyo’. Y terminando, dijo: ‘No tengas miedo’, repitiendo las palabras de San Juan Pablo II”.
Dom Henrique Soares da Costa fue uno de los obispos más respetados y reconocidos en Brasil por su fidelidad al Evangelio y por la claridad con la que defendió la doctrina correcta frente a las tergiversaciones de nuestros tiempos confusos.
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