La gaita gallega es un instrumento de viento madera típico del extremo noroeste de España y Portugal. En España está unido a la tradición de Galicia, el oeste de Asturias, la comarca de Sanabria en la provincia de Zamora y la comarca del Bierzo en León.
El sonido de la gaita acompaña la vida de los gallegos desde hace más de ocho siglos. A su ritmo cantan y danzan, celebran banquetes, rondan a las novias, cumplen aniversarios y despiden a sus difuntos. Son alegrías y tristezas que la gaita se encarga de plasmar en melodías que viajan por el aire.
Una melodía que llegue a todos
Con la pandemia del coronavirus, el obispo de Ourense, monseñor Leonardo Lemos, pensó que un modo de recordar a los fallecidos podría ser a través del sonido de este instrumento. La iniciativa ha quedado plasmada en que a diario un gaiteiro se encarga de tocar una melodía desde la Torre de la Catedral de San Martiño, en el corazón de Ourense.
El gaiteiro Bieito Romero fue el encargado de rendir tributo a las víctimas del coronavirus. “Cuando percibamos el son de la gaita desde la Torre de la Catedral de San Martiño, pensemos de un modo especial en aquellos que partieron, que están sufriendo y siguen sufriendolas consecuencias de la pandemia”, dijo el obispo, que estuvo acompañado por el presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar.
Con este acto tan arraigado en la cultura gallega, monseñor Lemos recordó el papel activo de los católicos: “La Iglesia en Ourense, que tengo el honor de presidir ayudado por los sacerdotes, está desde el primer momento en sintonía de colaboración y cooperación con todas las instituciones civiles y sanitarias”.
“No lo olvidaré”
Para Bieito Romero, tocar el himno de Ourense, “Ourense no solpor”, en un lugar tan vinculado a las raíces de Galicia y como tributo a las víctimas de la pandemia en todo el mundo, fue más que emotivo: “No lo olvidaré en toda mi vida”, manifestó al diario “El Faro de Vigo”.
Cada día será un gaiteiro o gaiteira el encargado de tocar el himno. A la iniciativa se ha sumado la empresa de moda Adolfo Domínguez, que quiso aportar una capa diseñada especialmente para quien tenga el honor de tocar.
El presidente de la Diputación subrayó que de este modo la figura del Gaiteiro de la Catedral, que será asumido por diferentes agrupaciones folclóricas, será “un símbolo que pone en valor la solidaridad, la música, la tradición y la cultura, desde un monumento único como la catedral de Ourense”.
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