El sacerdote, Fabio Stevenazzi, vuelve a ser médico contra la pandemia de coronavirus en Italia y para enfrentar la emergencia de falta de camas de hospital y de personal sanitario, además en línea con la creatividad pastoral necesaria en estos tiempos y que encarna la iglesia ‘hospital de campaña’ querida por el papa Francisco.
Stevenazzi, 47 años, antes de entrar en el seminario era médico y, ahora que las iglesias han sido vaciadas por los decretos de emergencia del Coronavirus del gobierno italiano, ha decidido volver a curar, en cambio de almas, esta vez, el cuerpo de los infectados del Covid-19, informó el sito de la iglesia de Milán.
El sacerdote italiano, ejerce su ministerio en la comunidad pastoral de San Cristoforo di Gallarate y ahora, trabajará en hospital de Busto Arsizio, el municipio de 83.290 habitantes de la provincia de Varese, y que es la ciudad más grande del Altomilanese y es la sexta ciudad más poblada de la Lombardía, la región italiana que ha sufrido el mayor golpe por el brote en toda Europa.
Una noticia positiva es que ayer el gobernador de Lombardia informó que los datosmuestran los primeros signos de una posible desaceleración en la pandemia, que ha registrado 1218 muertes desde el inicio de la crisis.
Padre Stevenazzi ha escuchado el llamado del papa Francisco a ser creativos y a estar más cerca que nunca al pueblo de Dios en estos momentos difíciles. Así, el sacerdote expresó su deseo a sus superiores. Y sus colegas del hospital lo recibieron con los brazos abiertos: reclutamiento inmediato, tal como se preveía en el comunicado oficial emitido por la Región de Lombardía para hacer frente a la emergencia sanitaria.
Durante diez años, padre Fabio, como le conocen sus fieles, que es originario de Lozza en Varesotto, trabajó como internista en la sala de emergencias de Legnano, otro municipio de la región de Lombardia, cerca a Milán.
Incluso después de su ordenación, que tuvo lugar en 2014, el presbítero nunca dejó de mantenerse al día en medicina con todos los créditos de formación requeridos y desde 2017 ha estado trabajando con la ONG Cuamm – Médicos con África, por lo que en los meses de verano de 2018 estuvo en Etiopía y en 2019 en Tanzania.
Para estar listo para enfrentar la emergencia del Coronavirus, participó en un entrenamiento específico, aprendiendo los procedimientos para la biocontención y protección de él y sus colegas.
La decisión del sacerdote de volver al hospital también le exigirá sacrificios personales, pues mientras los pacientes lo necesiten, él vivirá como un ermitaño en su pequeño apartamento de la casa parroquial, sin ver a sus hermanos sacerdotes. La misa la celebrará solo, y se ha preparado para ello, la Eucaristía será su alimento cotidiano para ir a enfrentar la emergencia y llevar también una sonrisa a sus pacientes.
Por su parte, la parroquia de San Giseppe de Busto Arsizio también se ha activado para ayudar a los médicos y los enfermeros del Hospital de Busto, donde trabaja padreStevenazzi. El párroco don Giuseppe Tedesco ha organizado un servicio para llevar emparedados, frutas y comida sana para el personal sanitario del servicio de infectología, que normalmente, no tienen descanso o pausa debido a su labor de emergencia.
Hoy celebramos a...