La historia de Carlos de Foucauld es bastante curiosa. Un largo camino, muchas veces lleno de oscuridad, que ayuda a intuir la paciencia de Dios en la realización de sus planes. Y que acaba en un hombre purificado convertido en Evangelio viviente, que te permite hacerte una idea de cómo era Jesús de Nazaret.
Conócelo un poco más a través de esta galería de imágenes:
![CHARLES DE FOUCAULT](https://wp.es.aleteia.org/wp-content/uploads/sites/7/2021/11/WEB3-CHARLES-DE-FOUCAULT-XSAINT-MichelPu-CC-BY-SA-4.0-modified.jpg?w=150&h=75&crop=1)
"Sólo para Él"
Carlos de Foucauld nació en Francia en 1858 en una familia rica y cristiana. Quedó huérfano a los 6 años. A los 16 perdió la fe y vivió sin control hasta los 20. Después de su conversión vivió en suma pobreza con los habitantes del desierto de Sahara.
“Apenas creí que había Dios, y que solo podría encontrarlo en la Iglesia católica, comprendí que solo podía vivir para Él; desde ese momento estaba decidida mi vocación religiosa. ¡Hay tanta diferencia entre Dios y todo lo que no es Él!”.
Foucauld viajero y aventurero
![charles-de-foucauld-dc3a9sert.jpg](https://wp.es.aleteia.org/wp-content/uploads/sites/7/2020/05/charles-de-foucauld-dc3a9sert.jpg)
Tras una breve carrera en el ejército, exploró Marruecos a través de trabajos geográficos y lingüísticos, por los que la Sociedad de Geografía de Francia le concedió la medalla de oro.
Empezó su vida ascética en 1890 en Siria y Palestina y fue ordenado sacerdote en 1901. Se estableció en Tamanrasset, Argelia, en 1905, en medio del pueblo tuareg. Allí fue asesinado el 1 de diciembre de 1916.
![AID TO THE CHURCH IN NEED; ALGERIA](https://wp.es.aleteia.org/wp-content/uploads/sites/7/2020/07/ACN-20200701-102785-1.jpg?w=150&h=75&crop=1)
Voz que grita en el desierto
Transitó su vida en el desierto africano sembrando un ideal: que todos los hombres tenemos un solo destino, ser hermanos.
Este grito en el desierto -aparentemente infecundo- es hoy el germen de fraternidades que se extienden por todo el mundo.