"Que la Virgen María nos ayude a contemplar cada día en Jesús el Don de Dios para nosotros, y a dejarnos involucrar por Él en el movimiento del don, con alegre asombro, para que toda nuestra vida se convierta en una alabanza a Dios en el servicio a nuestros hermanos".
Lo dijo el papa Francisco antes de rezar la oración mariana del Ángelus en la fiesta de la Presentación del Señor y Jornada Mundial de la Vida Consagrada del año 2020.
Modelos de acogida y donación de la propia vida a Dios
El Día de la Vida Consagrada "recuerda el gran tesoro en la Iglesia de aquellos que siguen de cerca al Señor profesando los consejos evangélicos", dijo el Papa.
Francisco comentó el Evangelio de San Lucas que narra la presentación del Niño Jesús en el templo para consagrarlo a Dios, como prescribía la Ley judía:
"Este episodio llama nuestra atención al ejemplo de algunos personajes que son tomados en el momento en el cual hacen experiencia del encuentro con el Señor".
Se trata de María y José, Simeón y Ana, que representan modelos de acogida y donación de la propia vida a Dios. El evangelista Lucas los describe a todos con una doble actitud: de movimiento y de asombro.
Movimiento: la vida cristiana es dinamismo y disponibilidad
La primera actitud es el movimiento, afirmó el papa Francisco. Vemos a María y José que se ponen en camino hacia Jerusalén. Por su parte, Simeón, movido por el Espíritu, va al templo. Mientras que Ana sirve a Dios día y noche sin descanso.
"De esta manera los cuatro protagonistas del pasaje evangélico nos muestran que la vida cristiana requiere dinamismo y disponibilidad de caminar, dejándose guiar por el Espíritu Santo".
Y el inmovilismo, señaló el Papa, no se acomoda con el testimonio cristiano y la misión de la Iglesia. Por ello, el mundo necesita cristianos que se dejen conmover, que no se cansen de caminar por las calles de la vida, para llevar a todos la palabra consoladora de Jesús.
"¡Todo bautizado ha recibido la vocación al anuncio, a la misión evangelizadora!
Las parroquias y las diversas comunidades eclesiales están llamadas a fomentar el compromiso de jóvenes, familias y ancianos, para que todos puedan hacer una experiencia cristiana, viviendo la vida y la misión de la Iglesia como protagonistas".
Asombro: capacidad de maravillarse ante lo que nos rodea
La segunda actitud, subrayó el Papa, con la que san Lucas presenta a los cuatro personajes de la narración es el asombro. María y José "se asombraron de las cosas que se decían de él [de Jesús]".
El asombro es también una reacción explícita del viejo Simeón, que en el Niño Jesús ve con sus ojos la salvación obrada por Dios en favor de su pueblo. Y lo mismo ocurre con Ana, que "también comenzó a alabar a Dios".
"Estas figuras de creyentes –señaló Francisco– están envueltas en el asombro, porque se dejaron capturar e involucrar por los eventos que estaban sucediendo ante sus ojos".
"La capacidad de maravillarse ante las cosas que nos rodean fomenta la experiencia religiosa y hace fructífero el encuentro con el Señor. Por el contrario, la incapacidad de asombrarse nos hace indiferentes y amplía la distancia entre el camino de la fe y la vida de cada día".
Nuestra vida se convierta en alabanza a Dios en el servicio
Antes de acabar, Francisco pidió que la Virgen María nos ayude a contemplar cada día en Jesús el don de Dios para nosotros. Y a dejarnos involucrar por Él en el movimiento del don.
Todo ello con alegre asombro, para que toda nuestra vida se convierta en una alabanza a Dios en el servicio a nuestros hermanos.
Abrir las puertas a nuevas formas de fraternidad solidaria
Después de rezar a la Madre de Dios, el Papa recordó que ese día en Italia se celebraba la Jornada por la Vida, con el tema: "Abran las puertas a la vida".
"Me asocio al Mensaje de los Obispos y espero que esta Jornada sea una oportunidad para renovar el compromiso de custodiar y proteger la vida humana desde el principio hasta su fin natural.
También es necesario contrastar toda forma de violación de la dignidad, incluso cuando están en juego la tecnología o la economía, abriendo las puertas a nuevas formas de fraternidad solidaria".
En el Día de la Vida Consagrada, Francisco invitó a todos los fieles a rezar por todas las personas consagradas. Ave María…