Diversas interrogantes surgen ante el fallecimiento de Jesús Manuel Rondón Molina, en una región donde la iglesia ha recibido serias amenazas por parte de grupos irregulares y funcionarios del gobierno de Maduro.
La extraña muerte del padre Jesús Manuel Rondón Molina, de la diócesis de San Cristóbal, en Venezuela, sacude a la opinión pública y a la iglesia del país suramericana, luego que su cuerpo apareciera en horas de la tarde del martes 21 de enero, en el sector El Campanario en La Palmita, una zona boscosa del fronterizo municipio Junín (Rubio) del estado Táchira.
Monseñor Mario Moronta anunció el fatal hallazgo del presbítero, luego su mensaje fue publicado en la cuenta oficial que la iglesia diocesana mantiene en la red social twitter: