Desde la Iglesia recuerdan que “nada se puede reconstruir sin un vigoroso renacer de nuestra educación; pero justo cuando más la necesitamos, la escuela se vacía de maestros, de estudiantes y de presupuesto, y agoniza de espaldas a la calidad”
“Sin educación de calidad, no podremos salvar ni la empresa productiva ni la república”. Lo advierte en un contundente mensaje sobre Venezuela Luis Ugalde, exrector de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab) y una muy respetada voz de los jesuitas en América Latina, al analizar las soluciones a la grave crisis que afronta la nación sudamericana.
Durante la presentación del Plan País Educación a la que acudió Aleteia, el sacerdote brindó una ponencia en la cual destacó los tres puntos que según la Iglesia se requieren para el “renacer” del país, apuntando a una urgente transición que le devuelva la democracia.
Tras advertir que Venezuela ya no cuenta con la renta del “oro negro”, mientras ve cómo quiebra su famosa industria petrolera, dejó claro que el país entero debe enfocarse en la verdadera riqueza: “¡Su talento humano!”.
El también intelectual dijo ser testigo de la amplitud y variedad de los grupos de trabajo para llegar al momento de esta propuesta a la crisis, al tiempo que destacó la importancia de “enfrentar la inmensa tragedia educativa que deja a Venezuela fuera del siglo XXI”.
Aulas se vacían de maestros y estudiantes
Sostuvo Ugalde:
“Nuestra República está destruida, la economía en ruinas y la gente en la miseria”. En este aspecto, señaló que “nada se puede reconstruir sin un vigoroso renacer de nuestra educación; pero justo cuando más la necesitamos, la escuela se vacía de maestros, de estudiantes y de presupuesto, y agoniza de espaldas a la calidad”.
“Ahora, cuando fracasa la ilusión de la fabulosa e inagotable renta y fracasa también la industria petrolera, el régimen carga sobre los hombros de la población su quiebra y su inmensa deuda”.
“Y necesitamos que el país entero se enfoque en la verdadera riqueza potencial que es el talento humano de millones de venezolanos, con su capacidad de producir convivencia y ciudadanía y rescatar el aparato productivo hoy en ruinas”, dijo.
No obstante, advirtió tajante: “Pero sin educación de calidad, no podremos salvar ni la empresa productiva ni la República”.
Tres propuestas de la Iglesia para el sector
El equipo variado que ha trabajado el Plan País educativa presentará lo que debemos y estamos dispuestos a hacer en educación para que Venezuela renazca, dijo.
Sin embargo, acentuó tres grandes elementos que en su opinión deben ser la columna vertebral de un programa exitoso de reconstrucción:
- Todos en la escuela y la escuela de todos. Ni un niño ni un joven perdiéndose fuera de la escuela. Al mismo tiempo, escuela de todos; es decir, de la familia, del Estado y de la sociedad entera. Ninguno de los tres puede solo. Y enfrentados y mutuamente excluyentes, les espera el fracaso total. Juntos en tierra solidaria, familia, estado y sociedad, y apoyándose y exigiéndose mutuamente se agigantan y logran una escuela renacida.
- Escuela de formación integral, que incluye conciencia y aprendizaje productivo; así como formación ciudadana con solidaridad y valores. También debe incluir alimentación para grandes sectores de la sociedad si queremos que los niños estén en la escuela y aprendan.
- Educación centrada en el rescate de los educadoresy con una sociedad conciente de que no podemos retener a los maestros con su capacidad creativa y formadora a partir de un sueldo de 7 dólares al mes; ni tampoco con 20 o 30.
“Los educadores centrados en la educación y bien remunerados son la clave de la buena educación”, argumentó Luis Ugalde.
“Sembrar implica esfuerzo y fe”
“Además de retener a los maestros de hoy, esta sociedad entera debe centrarse en el empeño de llenar de nuevo los pedagógicos y facultades de educación con los educadores de mañana”, clamó ante un auditorio que aplaudía conmovido en medio de la peor crisis de su historia.
El también educador universitario alertó además que “las familias deben convencerse de que no tendrán los mejores educadores para sus hijos, si ellas se niegan a que sus mejores hijos sean educadores y tengan el deseo y la alegría de ser formadores de la Venezuela que renace”.
Sostuvo igualmente que “nadie siembra si no espera que germine la semilla y nos traiga una cosecha abundante de vida”. En tal sentido, detalló que “sembrar es esfuerzo y fe”, mientras que “cosecha es vida, alegría y cambio de la ruina actual para transformarla en renacer nacional”.
“¡Apostamos por la vida digna!”
Señaló por último que el Plan País “sabe que la educación es el secreto del éxito de los pueblos, y la clave para transformar la actual pobreza, indigencia y tiranía en dignidad, prosperidad, democracia y libertad. Es la apuesta por la vida del venezolano”.
Y concluyó: “¡Somos bendecidos de Dios los que defendemos la vida digna de todos”.
El mensaje de Ugalde se presentó durante un foro realizado en los espacios del instituto técnico Don Bosco, en Caracas, a propósito del lanzamiento del Plan País en el sector educación, donde los maestros llamaron a recobrar el plan de alimentación, reimpulsar el transporte escolar y garantizar sueldos dignos para los docentes.
El plan de emergencia educativa y el “atención integral a los docentes” formó parte de la agenda presentada por el coordinador de Educación del Plan País, José Manuel Bolívar, quien destacó la necesidad de reconstruir física e interiormente las escuelas de Venezuela.
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