El Pontífice explicó que reabrirá la comisión que estudia la posibilidad del diaconado femenino El papa Francisco cerró este sábado 26 de octubre de 2019 el Sínodo dedicado a la Amazonía: “Nuevos caminos para la Iglesia y para una ecología integral” (texto completo de documento final aquí) que reunió a 184 padres sinodales. Francisco denunció a “esas élites cristianas y católicas” y a “estos grupos que quieren la cosita y se olvidan de la cosa”. Remarcó que lo más importante del Sínodo son los diagnósticos: cultural, ecológico, social y pastoral.
El papa Francisco puso en guardia de aquellos que intentarán desvirtuar el Sínodo y el documento final que ya ha autorizado para que sea divulgado con la votación. Grupos que desvirtúan las cosas buscando detalles sectarios y conflictivos.
Y citó una frase contundente de Charles Péguy: “Porque no tienen el coraje de estar con el mundo ellos se creen de estar con Dios, porque no tienen el coraje de comprometerse en las opciones del hombre, en las opciones de vida del hombre se creen de luchar por Dios, porque no aman a ninguno se creen de amar a Dios”.
El Papa pidió que le perdonaran por pedir de esta forma “no caer prisioneros de estos grupos que van a negar el cuerpo del Sínodo y del Documento Final”.
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El diaconado femenino
En otro momento, expresó que asume “el pedido de volver a llamar a la comisión” que estudió el diaconado femenino, “tal vez abrirla con nuevos miembros para seguir estudiando como existía en la Iglesia primitiva el diaconado permanente”.
“Ustedes saben que llegaron a un acuerdo (en la comisión nombrada por el Papa) entre todos que no era claro. Yo entregué esto a las religiosas, a la Unión General de Religiosas, que fue la que me pidió hacer la investigación, se la entregué y cada uno de los teólogos está con su linea, investigando en esto. Yo voy a procurar rehacer esto con la Congregación de la Doctrina de la Fe y asumir nuevas personas en esta comisión”.
“Recojo el guante, como indicaron por allí, y ‘que seamos escuchadas’”, dijo Francisco que recibió una carta de las religiosas que participaron en el Sínodo para pedir una mayor apertura en la escucha, la participación y las decisiones de las mujeres dentro de la iglesia.
Asimismo, agradeció a los participantes por su “testimonio de trabajo, de escucha, de búsqueda, de buscar poner en práctica este espíritu sinodal que estamos aprendiendo a fijar y que todavía no atinamos a completarlo, pero estamos en un buen camino…estamos entendiendo que significa discernir, escuchar, que significar incorporar la rica tradición de la Iglesia a los momentos coyunturales”.
“Algunos piensan que la tradición es un museo de cosas viejas, a mí me gusta repetir aquello que Gustav Mahler decía: ‘la tradición es la salvaguarda del futuro y no la custodia de las cenizas’, es como una raíz de la cual viene la savia que hace crecer el árbol para que de frutos”. La tradición, destacó, es “recibir y caminar en un mismo sentido”.
El Papa sostuvo que hubo tres temas con una mayoría para que sean temas de próximos sínodos en la Iglesia, uno de ellos fue “la sinodalidad”. “Yo no sé si será elegido este o no, todavía no me he decidido, estoy reflexionando y pensado…pero, ciertamente hemos caminado mucho y seguiremos caminando”.
Respecto al documento apenas votado por la Asamblea, el Papa aclaró que no es obligatorio que él haga una “Exhortación Post Sinodal”, sin embargo, manifestó que al final del año podría presentar sus palabras sobre su vivencia en el Sínodo. “Todo depende del tiempo que tenga para pensar”, dijo en tono de broma, aludiendo probablemente a su abultada agenda, y levantando risas en el Aula Nueva del Sínodo.
El Obispo de Roma destacó 4 dimensiones en las reflexiones del Sínodo, la primera, la dimensión de la inculturación que es un tema que lo deja “satisfecho” por su relación con la tradición de la Iglesia y en memoria del documento eclesial latinoamericano Puebla.
En segundo lugar, mencionó la dimensión ecológica y, en este sentido, agradeció al Patriarca Bartolomeo l, a quien llamó ‘pionero’ sobre el tema y “fue de los primeros que abrió el camino de la conciencia”.
Entretanto, rememoró Laudato Sí, su encíclica social ecológica, fruto del “trabajo de mucha gente: científicos, teólogos, pastoralistas”, para redactar un texto de “conciencia ecológica que va adelante y que hoy nos denuncia un camino de explotación compulsiva, de destrucción, en el que Amazonia es un símbolo”.
Sobre la conciencia ecológica, el papa Francisco indicó que las manifestaciones de los jóvenes ya sea en el movimiento de Greta (Thunberg) o de otros dicen: ‘El futuro es nuestro’…La conciencia ecológica evidentemente ya no es solo en la Amazonia, sino en el Congo y en el Chaco (en varios países de América del Sur).
En tercer lugar, la dimensión social, que junto a la dimensión ecológica, indica no solo la explotación del Creado, sino también de las personas. “En la Amazonía aparece todo tipo de injusticia, destrucciones de personas, explotación y destrucción de la identidad cultural”.
Francisco recordó su visita a Puerto Maldonado (Perú) y de un cartel que le impresionó con el rostro de una mujer amazónica retratada con el objetivo de sensibilizar sobre el tráfico de personas con una “corrupción a todo nivel”.
En cuarto lugar, señaló, la dimensión pastoral que sostuvo: “Comprende todas las anteriores”. “El anuncio del Evangelio urge, pero que sea entendido, que sea asimilado, que sea comprendido por esas culturas y se habló de laicos, de sacerdotes, diáconos permanentes y se habló de ese punto para fortalecer lo que hacen”.
En este apartado, citó la reflexión de los nuevos ministerios y de la creatividad evangélica para “ver hasta donde se puede llegar”.
“Se habló de seminarios indígenas, con mucha fuerza”. El Papa agradeció al cardenal O’Malley que dijo: “puso el dedo en la llaga”, pues no se le “permite a los aborígenes el camino seminaristico y el camino del sacerdocio”.
La formación sacerdotal es una da las cosas que necesitan una reforma. El Papa explicó que en las reflexiones del Sínodo emerge la necesidad de “reformar” la formación debido a que algunos países denunciaron “falta de celo apostólico en el clero, en la zona no amazónica, respecto a la zona amazónica”.
“Con el cardenal Filoni hemos tenido dificultades con una congregación religiosa que deja un vicariato de encontrar sacerdotes de ese país que tomen el vicariato, bueno eso hay que reformarlo”. El Papa sugirió que para aumentar el celo apostólico en el programa de la formación de los religiosos debería haber un año de presencia en zonas limítrofes, como la Amazonía.
El Papa luego indicó que recibió por escrito una petición para que los aspirantes agregados a las nunciaturas al servicio de la Santa Sede tengan en sus hojas de servicio, siendo jóvenes sacerdotes, al menos tengan un año al servicio de un obispo en una zona de misión, un lugar pobre y apartado. “Eso será estudiado”.
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Reforma del sacerdocio
La distribución del clero en el mismo país. El Papa afirmó que existen sacerdotes de países que comparten la Amazonía y que terminan en Europa o en Estados Unidos. El Papa contó la anécdota del obispo que le contó que tiene dos de esos sacerdotes en su diócesis en Italia pero que no viajan a los pueblitos más pequeños hasta que no les llega el dinero de la oferta. Advirtió de tener atención con estos detalles.
La mujer en la Iglesia
El Papa indicó que el documento se “queda corto” en referencia al papel de la mujer en la conservación de la fe y de la cultura del pueblo. Subrayó: “Todavía no nos hemos caído en la cuenta de lo que significa la mujer en la Iglesia y por ahí nos quedamos solamente en la parte funcional, que es importante, que tiene que estar en los consejos, en todo lo que se dijo, pero el papel de la mujer en la iglesia va mucho más allá de la funcionalidad. Y eso es lo que hay que seguir trabajando”.
Organización
El papa Francisco exhortó a mejorar la pastoral y la organización en la Amazonia, con una ampliación de la estructura de la REPAM o de un CELAM para esa zona. Es decir, una estructura para la misión permanente.
Curia romana y Amazonía
Mencionó que estudiará la propuesta para que dentro de la curia romana haya un discasterio con una sección especial para Amazonia. En este caso, la hipótesis es que el “Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral” abra una sección especial amazónica. “Como si no tuvieran trabajo, les pediré que hagan algo más”, dijo con una sonrisa.
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