Es raro, pero alguna vez alguien me pregunta qué necesito para ser una buena madre. Rápidamente, pienso en algo que me haga parecer una adulta responsable.
“La paciencia es importante. Y no perder a nadie cuando estás de viaje con la familia”. Tras una larga pausa, añado, “dejarlos jugar con la tierra me funciona muy bien, y espero que siga funcionando en los próximos 18 años. Somos cuatro contra dos aquí”.
Por suerte, la última parte del consejo es realmente muy buena. De acuerdo con un artículo de Brandie Weikle, nuestros hijos tienen que ensuciarse. Ella recibe el apoyo de Marie-Claire Arrieta, una microbióloga y autora del nuevo libro, Let Them Eat Dirt: Salving Our Children from an Oversanitized Word, que cree que mantener a los niños super limpios no les hace bien.
Para combatir las infecciones
Cuando se trata de limpiar constantemente a los niños, Arrieta dice: “Cuando nacemos, no tenemos microbios. Nuestro sistema inmunológico está subdesarrollado. Pero es ahí donde los microbios entran en escena, pues inician nuestro sistema inmunológico para funcionar correctamente. Sin microbios, nuestro sistema inmunológico no puede combatir bien las infecciones”.
Esto funciona muy bien para madres como yo, que no soy particularmente rápida cuando se trata de limpiar la mantequilla de maní antes de que se endurezca en la ropa del bebé. Estos nuevos descubrimientos deben ser un refugio al que los padres dan la bienvenida.
Durante los últimos ocho años, mi marido y yo expusimos involuntariamente a nuestros cuatro hijos a ambientes menos limpios, sin sentir mucha culpa.
Aquí unos consejos para ayudar a los papás a relajarse:
Empieza con un animal de compañía, que sea tuyo
Yo tenía dudas sobre si comprar un cachorro. ¿Por qué? Pelo en las sábanas. Pelo en el bebé. Pelo por todas partes. A mi marido le encantaba la idea. Y tenía razón, un estudio reciente en Finlandia descubrió que los niños que crecen en casas con un animal de compañía son menos propensos a las enfermedades.
El Dr. Eija Bergroth, que ayudó a realizar el estudio, dice: “Pensamos que la exposición a animales, de alguna forma, hace madurar el sistema inmunológico, así que cuando el niño entra en contacto con los microbios, está más preparado para enfrentarlos”.
Mira sus caras, no sus ropas
Kim Bongiornio entiende de niños desordenados. Bloguera ocupada y escritora freelance en Let Me Start By Saying, también trabaja a tiempo completo cuidando de su hijo e hija. Pero sabe que tener hijos felices es más importante que tener hijos super limpios.