Dos países de América Latina y El Caribe que se encuentran entre los diez primeros lugares en el índice Mundial de Libertad de Prensa 2019 –Jamaica (8) y Costa Rica (10)—hacen alentar esperanzas de que uno de los pilares de la democracia sí pueda tener cabida en la región.
El Índice Mundial de Libertad de Prensa de 2019, compilado por Reporteros sin Fronteras (RSF), muestra, sin embargo, cómo el odio a los periodistas ha degenerado en violencia directa en su contra, lo que contribuye a aumentar la espiral del miedo.
“El número de países considerados seguros, donde los periodistas pueden trabajar con total seguridad, continúa disminuyendo, mientras que los regímenes autoritarios continúan restringiendo su control sobre los medios de comunicación”, dice RSF.
América cada vez a peor
El Índice RSF, que evalúa el estado del periodismo en 180 países y territorios cada año, muestra que la hostilidad hacia los periodistas expresada por los líderes políticos en muchos países “ha incitado actos de violencia cada vez más graves y frecuentes que han alimentado un nivel de temor y peligro sin precedentes” para quienes ejercen esta profesión.
Este 2019 el índice de RSF trae un amargo recado para el continente americano: de todas las regiones del mundo, es América (del Norte y del Sur) la que ha sufrido el mayor deterioro (3.6 por ciento) en su puntaje regional que mide el nivel de restricciones y violaciones a la libertad de prensa.
El informe señala que esta caída no solo se debió al mal desempeño de Estados Unidos, Brasil y Venezuela; Nicaragua cayó en 24 lugares en un solo año hasta ocupar el lugar 114, una de los más grandes caídas en 2018-2019.
“Los periodistas nicaragüenses que cubren las protestas contra el gobierno del presidente Ortega son tratados como manifestantes y a menudo son atacados físicamente. Muchos tuvieron que huir al extranjero para evitar ser encarcelados por cargos de terrorismo”, dice el reporte anual de RSF.
México un país letal
El hemisferio occidental también tiene uno de los países más mortales para los medios de comunicación: México, donde al menos diez periodistas fueron asesinados en 2018. La instalación de Andrés Manuel López Obrador como presidente ha reducido “algo de la tensión entre las autoridades y los medios de comunicación”, pero no todo.
El Índice detalla que México (lugar 144 de 180 países) se está hundiendo cada vez más en una espiral de violencia e impunidad y continúa siendo el país más peligroso para los reporteros en América Latina.
“Los periodistas que cubren historias políticas delicadas o el crimen organizado son advertidos, amenazados y, a menudo, asesinados a tiros a sangre fría”.
Noruega a la cabeza, África sorprende
Por lo demás, Noruega ocupa el primer lugar en el Índice de 2019 por tercer año consecutivo, mientras que Finlandia ocupa el segundo lugar, Suecia el tercero y los Países Bajos el cuarto lugar porque ahí dos reporteros que cubren el crimen organizado han tenido que vivir bajo la protección permanente de la policía.
En África, las clasificaciones de Etiopía y Gambia han mejorado significativamente con respecto al Índice del año pasado.
Publicado anualmente por RSF desde 2002, el Índice Mundial de Libertad de Prensa mide el nivel de libertad de los medios en 180 países. Evalúa el nivel de pluralismo, la independencia de los medios de comunicación, el entorno para los medios y la autocensura, el marco legal, la transparencia y la calidad de la infraestructura que apoya la producción de noticias e información.
Y en este 2019 resume el estado de la situación con una sola frase: “Un ciclo de miedo”.
Hoy celebramos a...