El incendio de Notre Dame de París fue provocado por un cortocircuito, el alquitrán y los años. Pero la ola de fobia a las grandes catedrales de la cristiandad podría haber recibido un buen empujón para personas con aparentes desordenes mentales como Marc Lamparello.
Dos día más tarde del incendio en París, este hombre de 37 años de edad, quien vive en Nueva Jersey, trató de ingresar a la Catedral de San Patricio, en el corazón de Manhattan (Nueva York) aproximadamente a las 19:55, con cuatro galones de gasolina (unos once litros), junto con líquido de combustión y mecheros.
El jefe de la policía neoyorquina (NYPD), John Miller, informó que el sospechoso fue rápidamente identificado por personal de seguridad de San Patricio y arrestado de inmediato “sin incidentes”.
Sospechosa cercanía
Para Miller, el asunto de que Lamparello haya intentado entrar al recinto religioso con gasolina y encendedores dos días después de Notre Dame, es algo, por lo menos, “sospechoso”, aunque en sus primeras conversaciones con los detectives, el sospechoso no haya mencionado nada sobre este asunto.
El pasado Domingo de Ramos –quizá sin conexión con este intento– se produjo otro incendio en las criptas de Saint John The Divine en Morningside Heights.
En la versión de los agentes de seguridad que lo detuvieron, Lamparello simuló que su auto se había quedado sin gasolina, pero los agentes comprobaron que su coche sí tenía gasolina en el depósito y, junto con los miembros de la lucha antiterrorismo, lo detuvieron.
Intento de incendio intencional
Cabe resaltar que si bien los informes iniciales de fuentes policiales indicaron que el sospechoso fue capturado con los botes de gasolina dentro de la Catedral, la arquidiócesis de Nueva York dijo en un comunicado que el hombre no había entrado.
“El individuo fue detenido mientras trataba de entrar a la Catedral. Fue entregado a la policía. No pasó nada dentro de la Catedral”, subrayó el comunicado. La catedral de San Patricio está ubicada en la Quinta Avenida, entre las calles 50 y 51, frente al Rockefeller Center, en una de las zonas más concurridas de Manhattan.
Ayer jueves, Lamparello fue acusado de intento de incendio intencional de segundo grado, peligro imprudente de segundo grado y allanamiento, según informes del NYPD. La investigación está en curso y no está claro si podría enfrentar cargos adicionales.
Algo pasó con él
Marc Lamparello es profesor de filosofía, graduado en Phi Beta Kappa en 2004 en el célebre Boston College, y recientemente había sido director de música en una iglesia católica de Nueva Jersey.
Según una biografía de él en un libro reciente, Marc “ha estado muy involucrado en el estudio de la filosofía desde edad temprana, y está trabajando actualmente en otros dos proyectos para un libro, que incluyen un diálogo sobre argumentos a favor y en contra de la existencia de Dios, y una serie de ensayos sobre la epistemología de la motivación práctica”.
Lamparello tenía un boleto solamente “de ida” desde el aeropuerto de Newark a Roma y estaba programado para partir ayer jueves por la noche, informa el New York Daily News. Su padre le dijo al periódico que Marc es un profesor “brillante” y que sonaba normal por teléfono apenas unas horas antes del incidente.
Según el progenitor de Marc, su detención y sus intenciones de quemar la Catedral están “extremadamente fuera de lugar” pues se trata de “un profesor brillante” aunque muy difícil de entender en sus escritos. “Algo pasó, no lo sabemos”, terminó diciendo el padre de Marc a la prensa.
Hoy celebramos a...