¿Por qué México tiene todavía tantos millones de indios marginados, pobres, ignorantes, explotados?
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“Yo tengo la impresión de que el mandatario mexicano se equivocó de destinatarios”, comenzó su discurso el escritor Mario Vargas Llosa durante la inauguración del VIII Congreso Internacional de la Lengua Española que se celebra estos días en Córdoba (Argentina).
El ganador del Premio Nobel, nacido en Arequipa (Perú) se refería así al tema de temas en estos días: la carta que emitió el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, al papa Francisco y al rey Felipe VI de España, exhortándolos a pedir disculpas a México por las violaciones a los derechos humanos de los indígenas por parte de España y la Iglesia durante la conquista del siglo XVI.
“Esa carta debió mandársela a él mismo y responderse –y respondernos—a la pregunta de ¿por qué México, que hace cinco siglos se incorporó al mundo occidental gracias a España y que desde hace doscientos años es independiente y soberano, tiene todavía tantos millones de indios marginados, pobres, ignorantes, explotados?”, apuntó Vargas Llosa, en una alocución improvisada pero que captó la atención del auditorio… y de Iberoamérica en su conjunto.
Con la presencia del propio rey de España, Felipe VI, y del mandatario argentino Mauricio Macri, el autor de Conversaciones en la Catedral, La Casa Verde o El hablador, entre otras muchas obras, apuntó que la pregunta que debería haberse hecho López Obrador era una pregunta “que se podrían hacer, prácticamente, todos los presidentes latinoamericanos”.
El problema actual del vasallaje de los herederos de los pueblos originarios y su marginación “no está allá, dijo Vargas Llosa, en el pasado de hace quinientos años, o cuatrocientos, está aquí, vivo, hoy, y nos golpea la conciencia a nosotros los latinoamericanos que no hemos sido capaces de resolverlo”.
Más adelante, el escritor nacionalizado español hizo votos para que, cuando termine el mandato de López Obrador –en 2024—“los indios mexicanos tengan mejores condiciones de vida; hayan obtenido, gracias a esta gestión, más oportunidades, mayor educación, de tal manera que se haya levantado esa losa que los ha tenido discriminados y explotados a lo largo de tantos siglos”.
Durante su discurso comentó el autor de La Tía Julia y el Escribidor: “El señor López Obrador no parece enterado de que tantas matanzas de indios no se cometieron durante los años coloniales; en algunos países –como éste que nos acoge y Chile, por ejemplo—cometieron matanzas de indios, terribles, matanzas espantosa, no durante la Colonia, sino durante la República. Y que esas matanzas se han seguido cometiendo, por ejemplo en la Amazonía, en la época del caucho”.
Y finalmente subrayó que el problema de las matanzas de indígenas no es de quienes se quedaron en España, sino que ese es un problema que afecta, fundamentalmente, a los españoles que vinieron a América, “y se quedaron aquí: es decir, a los bisabuelos, tatarabuelos del señor López Obrador… y míos, tanto como de los millones de latinoamericanos que nos sentimos orgullosos de tener ancestros españoles”.
Vargas Llosa, ya tuvo un duro desencuentro con el gobierno mexicano cuando en una conversación televisada con Octavio Paz y Enrique Krauze, en 1990, llamó al régimen de partido hegemónico (el PRI, en el poder desde 1929 hasta el año 2000), “la dictadura perfecta”, cosa que fue descalificada por el propio Paz y el gobierno mexicano.