La fórmula inventada por Courtney Carver lleva casi 10 años en funcionamiento y se ha posicionado como método práctico para crecer en conciencia ecológica.Reducir el consumo de ropa es un objetivo que debería formar parte de nuestra lista de propósitos de cada año. Los datos certifican de forma alarmante que (en el primer mundo) compramos muchas más prendas de las que necesitamos. Incluso hay miles de personas que reconocen que compraron algo por impulso o capricho y al cabo de un año está todavía sin estrenar.
Consumir menos ropa nos lleva a conseguir un mundo más sostenible poniendo cada uno de nuestra parte con acciones cotidianas. Así se logra el reto y se pone en práctica el llamamiento del Papa Francisco a cuidar la Casa Común (el planeta) en la encíclica “Laudato Sì”.
Para convertir en realidad los deseos de reducir el consumo de ropa a nivel mundial, nació en 2010 una iniciativa de largo recorrido: el proyecto 333. Este sistema propone que nos pongamos ante nuestro armario, estudiemos bien qué cosas tenemos y seleccionemos 33 prendas. Lo demás va fuera. Las 33 prendas incluyen collares, pañuelos y bufandas. Con ellas vamos a vivir 3 meses. De ahí el nombre 333.
El Proyecto 333 fue creado en 2010 por la norteamericana Courtney Carver, a raíz de un cambio de planteamiento en su vida. En 2006 se le diagnosticó una esclerosis múltiple y a partir de aquel momento se empleó a fondo en simplificar su vida. Es autora del blog Be more with less (sé más con menos). En español, una de las mujeres que lideran ese “movimiento” es Valentina Thörner.
Haz un “proyecto 333” al menos una vez
Diez años después de dar a conocerlo, el Proyecto 333 sigue en pie. Puede que sea difícil llevarlo a rajatabla durante toda la vida: depende del estilo de vida que llevemos, de nuestras obligaciones sociales o de nuestra tarea profesional. Sin embargo, aplicarte “un 333” al menos en una ocasión te hará ver muchas cosas acerca de ti misma y aporta grandes ventajas:
Aprendes a priorizar
No existe el por si “acaso” y el 333 te lleva a preguntarte si verdaderamente necesitas cada prenda. Serás una persona más selectiva y aplicarás más la razón para saber si prefieres una prenda u otra, porque te lo habrás razonado.
Repensarás tu consumo
Al establecer las 33 prendas que vas a dejar en tu armario, ocurrirá que frenas considerablemente las compras de ropa. antes de comprar algo nuevo, revisa lo que ya tienes. Es un modo espléndido de ahorrar indirectamente.
Aprenderás a distinguir la calidad de las prendas
Al tener solo 33 prendas, eso te llevará a lavar la ropa con más frecuencia. Descubrirás qué tejidos duran más y qué otros se desgastan con facilidad y exigen comprar una prenda nueva. Esa experiencia nos hace tomar conciencia como consumidores.