Serie cómica de Chuck Lorre sobre la amistad y el compromiso entre las personasEn la pasada edición de la ceremonia de los Globos de Oro, El método Kominsky, serie de televisión distribuida por Netflix, obtuvo dos de los tres galardones a los que estaba nominada: Mejor Actor de Serie de Comedia o Musical (Michael Douglas) y Mejor Serie de Televisión de Comedia o Musical (Chuck Lorre), dejando fuera del reparto de premios, injustamente, al otro actor nominado (Alan Arkin). Para quienes entonces no la habíamos visto, aquello era una sorpresa. Pero no lo es tanto cuando uno averigua que el productor es Douglas y que su creador, Lorre, fue el artífice de Dos hombres y medio y Big Bang Theory, dos de las series más exitosas de todos los tiempos.
El método Kominsky es, en primera instancia, una especie de actualización para el siglo XXI de aquellas comedias en las que Jack Lemmon y Walter Matthau se obstinaban en discutir y, al mismo tiempo, no podían estar separados: especialmente durante aquellos años en que, ya mayores, se habían convertido en “dos viejos gruñones”. Pero la serie, en un segundo plano, va en realidad sobre el arte de envejecer. Sobre cómo, con la edad, vamos perdiendo a seres queridos, eligiendo otros caminos que a veces conducen al equívoco, soportando las revisiones médicas y los veredictos del doctor, tratando de seguir adelante mientras el cabello encanece (Douglas) o se cae (Arkin). Douglas y Arkin interpretan a Sandy Kominsky y a Norman Newlander, respectivamente: dos hombres que sufren los achaques de la edad, y que están viviendo un tiempo que les deja atrás (las nuevas tecnologías, las redes sociales, las prisas actuales).
Kominsky es un actor de éxito que, sin embargo y dados sus setenta y pico años, no logra trabajar ni en el cine ni en la televisión, ni siquiera rodando anuncios; para mantenerse, da clases de interpretación en una academia propia. Newlander es su agente, un tipo gruñón que maneja una empresa a la que lleva dos años sin acudir porque tiene súbditos, secretarios/as y una plantilla enorme. Al poco de comenzar la serie, Newlander pierde a su mujer por el cáncer. Y se siente solo, desvalido y atemorizado: cree que es injusto que él haya sobrevivido a su esposa, una prestigiosa actriz. Kominsky se ha divorciado tres veces y parece ser un tipo incapaz de mantener una relación estable. Cada uno de ellos ha criado a una hija. Y poco a poco van averiguando que, en realidad, es lo que tienen, lo que les queda, algo a lo que aferrarse: sus hijas y una amistad sólida, pese a que siempre están humillándose e insultándose el uno al otro.
En una escena clave de la serie, Newlander admite tener mucho miedo, ahora que está viudo. Entonces Kominsky le dice: Todos tenemos miedo, ¿sabes por qué? Porque este mundo da mucho miedo. Pero seguimos adelante porque no estamos solos. Y no lo estás.
Bajo sus capas de comedia y las réplicas ingeniosas que se lanzan Arkin y Douglas hay un poso de drama: porque nos hablan de la viudez, de la soledad, del proceso lento pero imparable de envejecimiento. El método Kominsky apuesta por la amistad y la fe en los demás, en quienes nos rodean y nos soportan, para salir adelante y no desfallecer. Arkin y Douglas están sensacionales en sus papeles, y por si fuera poco la serie va incluyendo a celebridades haciendo cameos. Son ocho episodios de alrededor de 25 minutos cada uno: merece la pena pasar los buenos ratos que estos dos viejos gruñones nos brindan.
Ficha Técnica
Título original: The Kominsky Method
País: Estados Unidos
Director: Chuck Lorre, Andy Tennant, Beth McCarthy-Miller, Donald Petrie
Guión: Chuck Lorre
Música: Jeff Cardoni
Género: Serie de tv / Comedia
Duración: 8 episodios de aprox. unos 25 min. cada uno
Reparto: Michael Douglas, Alan Arkin, Sarah Baker, Nancy Travis, Susan Sullivan, Lisa Edelstein, Danny DeVito, Ann-Margret