Este joven médico estadounidense que trabaja en un hospital infantil decidió bailar con sus jóvenes pacientes para devolverles la sonrisaSu movimiento de caderas haría que Michael Jackson se pusiera verde de envidia. Tony Adkins, médico adjunto del hospital infantil del Condado de Orange, California (Estados Unidos), practica una medicina muy particular. De hecho, este joven médico no se contenta con repartir diagnósticos con su bata blanca. Utiliza un método de atención un tanto particular: baila con sus jóvenes pacientes para reconfortar sus corazones. “Como muchos, también he superado muchas adversidades”, explica desde su muro de Facebook. “Mi filosofía en relación al tratamiento de los pacientes es individualizar a cada paciente y cada familia”.
Basta con mirar el rostro de esta joven en silla de ruedas, que parece estar encantada con el baile, para entender que este médico con pajarita no se equivoca en su método. El buen humor y la sonrisa dan buena fe de ello.