En la localidad de Salto de Guiará, departamento de Canindeyú, Paraguay, hay un lugar maravilloso para los amantes de las fotografías. Es ahí donde los visitantes se ven sorprendidos ante una imagen gigante de la Virgen de Caacupé y un Cristo también magnánimo que saluda desde lo más alto.
Es desde ahí –en lo que ha sido denominado Plaza de la Fe– donde también se puede tener una excelente panorámica del río Paraná, uno de los más famosos de la región. Es habitual que quienes lleguen al lugar se saque una foto o selfie –modalidad que ha ganado protagonismo en la actualidad- y eleve una plegaria por los suyos.
A nivel local se han hecho varios esfuerzos para posicionar el lugar como atractivo turístico y se caracteriza por el aporte tanto de la Municipalidad como de los vecinos -construcción del oratorio- para que ello acontezca, recuerda Última Hora.
En ese sentido, el día por excelencia en el que llegan peregrinos en mayor número es el 8 de diciembre. Desde la víspera ya son muchas las personas que se animan a acercarse al lugar para dejar una vela encendida.
Pero este lugar también representa una gran oportunidad para quienes visualizar arroyos o cursos de agua gracias a los afluentes, por ejemplo, de Paraná. No en vano el nombre de Salto de Guiará tiene que ver con una cascada en la zona fronteriza con Brasil.
Ubicada a 200 metros sobre el nivel del mar, Salto de Guiará se caracteriza por tener un clima agradable cuya principal actividad económica efectivamente es el turismo.
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