En las últimas horas la noticia volvió a sacudir a Perú. El expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), luego de nueve meses en libertad, debe regresar a la cárcel. La decisión estuvo a manos de la Corte Suprema de Perú, que ordenó la captura para que continúe cumpliendo su condena de 25 años tras las rejas.
Fujimori había sido condenado en 2009 por delitos de lesa humanidad y corrupción. A fines de 2017 el ahora exmandatario Pedro Pablo Kucszynski (PPK) le había otorgado el beneficio del indulto por “razones humanitarias”. El hecho generó todo tipo de reacciones y protestas, además de críticas a PPK a quien se acusó de haber generado un acuerdo político para evitar su destitución por casos de corrupción vinculados a Odebrecht, algo que finalmente no fue posible.
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En las últimas horas, luego de conocida la noticia de la anulación de su indulto, trascendió que Fujimori sufrió una descomposición y tuvo que ser hospitalizado.
La “profecía” del papa Francisco
“¿Qué pasa en Perú que todos los presidentes terminan presos?” La pregunta generó sorpresa entre quienes lo estaban escuchando. La lanzó el propio papa Francisco en un encuentro con los obispos del Perú en enero de 2018. La “profecía” de Francisco ocurrió al poco tiempo del indulto a Fujimori y mientras aún PPK seguía siendo el primer mandatario (dimitió en marzo de 2018 y el actual presidente es Martín Vizcarra).
“¿Qué pasa en Perú que cada vez que sale un presidente lo meten preso? Humala está preso, Toledo está preso (se halla prófugo), Fujimori estuvo preso hasta ahora y Alan García está que entro y no entro; y presos con rabia, ¿no? El sistema llama la atención”, expresó Francisco en aquel momento.
En el caso de Ollanta Humala (2011-2016), investigado por casos de corrupción también vinculados a Odebrecht junto a su esposa, recuperó la libertad en abril de 2018 luego de varios meses en prisión, pero las pesquisas continuaban.
Otro de los expresidentes mencionados por Francisco fue Alejandro Toledo (2001-2006), quien tiene sobre sus espaldas una orden de prisión preventiva también por casos de corrupción y con una orden de extradición debido a que estaba residiendo en Estados Unidos.
En el caso de Alan García (2006-2011), la sombra de la corrupción también lo ha rozado, ha sido citado a declarado, pero no ha ido ha ido a prisión.
Pero lo dicho por Francisco en aquel momento excede lo coyuntural y representó una clara reflexión sobre el tema de la política y la corrupción en América Latina.
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“La política enferma y está muy enferma. Y ojo que hay excepciones, pero en general la política en América Latina está más enferma que sana”, lanzó en su momento, al tiempo de hacer énfasis en la necesidad de volver a recuperar el valor de la honestidad.
Sin lugar a dudas el caso de Fujimori tiene otras connotaciones que van más allá del tema de la corrupción, pues hay víctimas y delitos contra los Derechos Humanos de por medio, pero esto no quita que por estas horas aquella frase de Francisco vuelva a ser recordada.
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