Sentirse solo en la escuela puede ser angustioso para un niño. ¿Cómo respondes a tu hijo o hija si te dice que no tiene ningún amigo? ¿Cómo puedes ayudarlo a lidiar con esa situación difícil sin sobrecargarlo con tus propias preocupaciones?
Tú y tu cónyuge pueden no responder igual a este problema, dependiendo de su temperamento e historia personal. Navegar en esta situación difícil exigirá una buena comunicación. Si realmente quieren ayudar a su hijo, necesitan estar totalmente abiertos el uno con el otro.
Navega por tus propios sentimientos
Primero, necesitas validar tus propios sentimientos: ¿cómo está afectándote esta situación? Puedes descubrir que los recuerdos de sentimientos heridos en la escuela resurgen cuando ves luchar a tu hijo.
Pratica la autocompasión reconociendo tus propios sentimientos antes de hablar con tu hijo. Eso te ayudará a evitar proyectar tus miedos en él.
Después de reconocer tus sentimientos, estarás mejor preparado para descubrir cómo tu hijo está procesando la situación: observar y hacer preguntas te ayudará a aprender más sobre los sentimientos y necesidades de tu hijo.
Consejos para ayudar a tu hijo a hacer amigos:
1
haz un plan
Ayuda a tu hijo a desarrollar un plan de acción: “¿Quién te gustaría que fuese tu amigo? ¿Cómo puedes aproximarte a esa persona? ¿Puedo ayudarte?”. Los niños generalmente tienen respuestas para esas preguntas.
2
invita a otros niños
Ayuda a tu hijo a formar amistades proporcionando ocasiones para que pase tiempo con otros niños. Cada niño tiene su propio nivel de confort en la interacción social. A algunos niños les encantan los cumpleaños, mientras que otros prefieren ir al cine con un amigo. Un niño tímido puede preferir la última opción; no tendrá que pasar horas con un compañero que aún no conoce bien, pero será un primer paso en dirección a la amistad.
3
da nuevas opciones
Si preguntar: “¿Quieres jugar conmigo?” es intimidante para tu hijo, tal vez puedes sugerirle que se interese por lo que los demás están haciendo para abrir conversación: “¿Cuál es tu héroe favorito? ¿Cómo va tu clase de música? ¿Dónde conseguiste esa mochila tan bonita?”.
4
entiende su deseo de encajar
¿Tu hijo quiere vestirse como los demás niños o participar de actividades comunes para encajar? Tu hijo puede querer aprender los nombres de los atletas o ver cierta película para poder hablar de ella con los compañeros. Intenta apoyar el deseo de tu hijo de compartir experiencias comunes con los demás, aunque te parezcan triviales.
5
obtén ayuda de otros padre
Aunque sea importante respetar la confianza de tu hijo y evitar interferir, especialmente durante la adolescencia, conversar con otros padres sobre las preocupaciones de tu hijo puede ser útil. Reclutar a otros padres como aliados para ayudar a tu hijo a formar amistades puede ser beneficioso para tu hijo y sus futuros amigos. Puedes sugerir a otro padre que tus hijos coman juntos o planeen ir juntos a una actividad compartida.
6
busca amistades fuera de la escuela
Felizmente, la escuela no es el único lugar donde los niños pueden hacer amigos. Pregunta a tu hijo los nombres de los niños de su barrio. Llamar su atención a esas relaciones le ayudará a darse cuenta de que tiene oportunidades de amistad fuera de la escuela.
7
busca a su profesor
El profesor de tu hijo puede tener una idea de lo que tu hijo está pasando en la escuela. A veces un “no tengo amigos” significa simplemente que “fulano de tal no quiere jugar conmigo” o “no soy amigo de niños populares”.
8
Consulta a un experto
Si la situación de tu hijo se convierte en una fuente de ansiedad para él (o para ti), considera buscar el apoyo de un terapeuta. Un psicólogo o consejero infantil puede ayudar a tu hijo en la socialización o descubrir lo que le inhibe de relacionarse con los demás.