¿Qué supondrá la octava ampliación de la UE?
La Unión europea ha decidido llevar a cabo la octava ampliación prevista para el año 2025. La decisión será ratificada en una cumbre a celebrar este mes de mayo en Sofía (Bulgaria).
La ampliación se hará para los países de los Balcanes Orientales (Serbia, Montenegro, Bosnia Herzegovina, Albania y Macedonia) más Islandia, la isla que se encuentra situada en el noroeste de Europa.
La cumbre se celebrará el 17 de mayo entre los máximos representantes de la UE y de todos los países de los Balcanes candidatos. También estarán los países miembros de la UE de los Balcanes, Bulgaria, Eslovenia, Croacia y Rumanía
La ampliación hacia los países balcánicos es una cuestión de geopolítica, pues quedaban enjaulados entre países de la Unión Europea, como son Rumanía y Bulgaria, en el este y Croacia e Italia en el este.
Esta ampliación no debería tener muchas dificultades en el orden económico, pues aun siendo países con bajo nivel económico, tienen hasta el año 2025 para superar el periodo transitorio y poner en orden la economía de acuerdo con los parámetros de la UE: reducción del déficit público, aumento de la capacidad de producción, reducir el endeudamiento aquellos que lo tienen alto, eliminar proteccionismos y abrir las puertas al mercado europeo, mejorar las infraestructuras, etc.
Estos países una vez dentro de la UE podrán recibir fondos estructurales para incrementar su red de infraestructuras. El conjunto de los países de los Balcanes Occidentales suman un PIB de 77.000 millones de euros, para 20 millones de habitantes, o sea el 6,4 del PIB español.
El problema que generan estos países es su enfrentamiento todavía latente desde la caída del comunismo, y la UE no quiere que ingresen países conflictivos entre sí. Es muy difícil apaciguar el odio generado por una guerra reciente, especialmente cuando hay racismo y diferencias religiosas de por medio.
Kosovo, por ejemplo, que declaró su independencia de Serbia de modo unilateral, ha sido vetado por España por este motivo. Moldavia, un país que perteneció a la Unión Soviética y ha pedido su incorporación a la UE, está al este de Rumanía tiene el conflicto con la región de Transnitria, que ha declarado su independencia, no reconocida. Moldavia es el país más pobre de Europa, con 3,1 millones de habitantes y un PIB de 6.100 millones de euros.
Sin embargo, en estos países abunda la presencia de musulmanes, que son mayoría en Albania, Bosnia Herzegovina y Montenegro. Es la incorporación de poblaciones islámicas no beligerantes en el corazón de Europa.
La presidencia semestral de turno de Bulgaria en la Unión Europea, ha trabajado mucho para solucionar el problema de estos países aislados y rodeados de países miembros de la UE. En Skopje, capital de Macedonia, se acaba de celebrar una reunión de jefes de gobierno de estos países, incluido Kosovo, presididos por el jefe de gobierno de Bulgaria y presidente de turno de Europa, Boyko Borissov, junto con el presidente del Consejo de Europa, Donald Tusk.
Ahí se han trazado los planes para la incorporación de estos países, los cuales deberán seguir las recomendaciones que la Comisión Europea ha hecho para cada uno de ellos antes de su ingreso.
Queda pendiente, además de Kosovo y Moldavia, Turquía, país musulmán, en medio de Europa y Asia. De momento las conversaciones con Turquía no avanzan porque, entre oras cosas, el régimen turco no respeta el modelo democrático de la UE.