El jaloneo viene desde septiembre de 2017, cuando el presidente Donald Trump invitó a los campeones de la liga nacional de baloncesto (NBA), los Golden State Warriors, a visitarlo en la Casa Blanca, como parte de una tradición que cumplen los equipos que ganan el título.
El estrella del equipo que juega en la ciudad de Oakland (California), Stephen Curry, lideró entonces una protesta por cómo estaba tratando el presidente Trump a los jugadores de color de fútbol americano que doblaban la rodilla al escuchar el himno de los Estados Unidos.
De inmediato, Trump se retractó de la invitación a Curry aduciendo que ir a la Casa Blanca es un gran honor y si Curry titubeaba mejor que no fuera, que le retiraba la invitación a él (pero no a su equipo).
El tweet de Trump causó que el súper estrella de los Cleveland Cavaliers, LeBron James, dijera cosas como que, en efecto, ir a la Casa Blanca era un privilegio “hasta que apareciste tú” (refiriéndose al presidente Trump).
Una forma de expresarnos
La tormenta paró hasta esta semana, cuando los campeones de la temporada pasada –un equipo plagado de estrellas liderados por Curry y Kevin Durant—decidieron en bloque, finalmente, no asistir a la Casa Blanca, a charlar con Trump y a tomarse la foto con él.
Según dijeron los representantes del equipo que se perfila, de nuevo, al campeonato de la NBA (tiene en la actualidad el mejor récord de ganados y perdidos de todos los clubes que juegan en la mejor liga de baloncesto del mundo) “no ir a la Casa Blanca es una forma de expresarnos”.
Los Warriors explicaron a la cadena de televisión estadounidense CNN que su decisión se basa en que el presidente Donald Trump “excluyó a muchos sectores” y agregan que “apoyamos a todos aquellos que han sufrido una falta de respeto”.
En su reciente visita a Washington, en lugar de ir a la Casa Blanca, los Warriors asistieron al Museo Nacional de Historia y Cultura de los afroamericanos, acompañando a diversos grupos escolares.
Nuevo activismo político
“Celebramos nuestro campeonato de la mejor manera posible·, dijo a CNN el alero de los Warriors, Kevin Durant. Y esa manera fue con la asistencia de algunos niños del vecindario donde el propio Durante creció.
El escolta del equipo Klay Thompson, resaltó que los excluidos por el presidente Trump son los musulmanes, la comunidad afroamericana, las mujeres y, como ellos viven en California, sobre todo a la comunidad mexicana “el presidente les ha faltado al respeto”.
Thompson explicó que el activismo entre los atletas de Estados Unidos está creciendo y comienzan a usar la plataforma de su fama o de su reconocimiento para darle voz a los que viven en las comunidades en las que ellos crecieron y que no son tomados en cuenta.
El de los Warriors es un capítulo más de las desavenencias que ha tenido el presidente Trump con los atletas de color y con sus compañeros en el año y dos meses que lleva al frente de su país.
Hoy celebramos a...