“Purifícame, límpiame, Señor…”Enséñame tu camino, Señor,
y andaré en tu luz,
dame un corazón entregado a ti para honrarte, oh Dios.
Purifícame, límpiame, Señor
y líbrame de lo que impida el fluir,
purifícame, límpiame, Señor
y líbrame de lo que impida el fluir de tu amor
Enséñame tu camino, Señor,
y andaré en tu luz,
dame un corazón entregado a ti para honrarte, oh Dios.
Purifícame, límpiame, Señor,
y líbrame de lo que impida el fluir
purifícame, límpiame, Señor,
y líbrame de lo que impida el fluir de tu amor
Es tu amor el que yo deseo en mi vida, Señor Jesús.
Por Marcos Witt
Artículo originalmente publicado por Oleada Joven