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El Washington Post ha contado que la ex gimnasta Rachael Denhollander utilizó el pasado miércoles su testimonio contra su abusador Larry Nassar como mensaje de gracia y de perdón.
La Denhollander fue la última víctima en ofrecer su declaración en el proceso que se está llevando a cabo en Michigan (Estados Unidos) contra Nassar, ex médico de la selección nacional estadounidense de gimnasia. La jueza Rosemarie Aquilina condenó al imputado a 175 años de cárcel por haber abusado de las jóvenes gimnastas, teniendo en cuenta la condena a 60 años recibida anteriormente por pedopornografía, como recuerda el Independent.
Nassar, de 54 años, ha sido reconocido culpable a noviembre de siete acusaciones de abusos sexuales en la Ingham County, y en estos días afrontará otras tres acusaciones en el Eaton County. Casi 160 mujeres han denunciado al médico, que molestó a las jóvenes atletas durante veinte años haciendo pasar los abusos por una terapia.
“Mientras éramos violadas sexualmente, Larry se excitaba sexualmente con nuestra humillación”, confesó Denhollander, que usó parte de su declaración, que duró 36 minutos, para referirse a la Biblia, y que citó también al autor cristiano C.S. Lewis.
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“En nuestras primeras audiciones llevabas tu Biblia a la sala del proceso, y hablaste de rezar por el perdón, y sobre esta base te cuestiono. Si has leído la Biblia que traes, sabrás que la definición del amor sacrificial es la del mismo Dios, que ama con tal sacrificio que renunció a todo para pagar el precio de un pecado que no había cometido, Con esta gracia también yo elijo amar de esta manera”, dijo Rachel a Nassar delante del tribunal.
En 2016, la gimnasta fue la primera en acusar a Nassar de abusos sexuales, que tuvieron lugar en el año 2000 cuando tenía 15 años y él era medico deportivo en la Michigan State University, cuando ella acudió a su consulta por un problema en la espalda. Su valor a la hora de denunciar lo ocurrido animó a más de cien jóvenes atletas víctimas a ofrecer su testimonio y lograr la condena de su abusador.
Desde el banco de los testigos habló a Nassar de la descripción bíblica del juicio final, “donde toda la ira de Dios y el terror eterno se volcarán sobre hombres como tu”.
“Si tuvieras en algún momento que llegar al punto de afrontar de verdad lo que has hecho, el sentimiento de culpa sería aplastante. Y esto es lo que hace al Evangelio de Jesús tan dulce. Porque extiende la gracia, la esperanza y la misericordia donde no se podría encontrar. Y estará allí para ti. Rezo para que puedas experimentar el peso aplastante de la culpa para que un día puedas experimentar el verdadero arrepentimiento y el verdadero perdón de Dios, que necesitas más que el perdón por mi parte – aunque también te lo doy”.
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En respuesta a su testimonio, la jueza Aquilina afirmó: “Quiero que usted sepa que sus palabras son justas – no sólo ha denunciado su caso, sino que ha construido un ejército de supervivientes del que usted es general de cinco estrellas”. “Sus hermanas supervivientes y yo le damos las gracias. Es usted la persona más valiente que nunca he tenido en mi tribunal”.
La Denhollander tiene 33 años y es madre de tres hijos, abogada y entrenadora. El New York Times relata cómo esta experiencia condicionó profundamente su vida, hasta el punto de ser incapaz de confiar en un médico incluso en el momento del parto, con “un miedo que la invadía en cada nacimiento”. El recuerdo de lo que le hizo Nassar “arrojó una sombra terrible sobre la que habría debido ser una ocasión de pura alegría”.