Juan Pablo II y la revolución de la libertad: Y el atleta de Dios derrocó al comunismo

De la mano de la exquisita distribuidora española, Goya Producciones, especializada en contenidos audiovisuales con valores, llega a los cines el 6 de octubre el documental biográfico Liberando un continente: Juan Pablo II y la revolución de la libertad, escrito y dirigido por David Naglieri, quien posee una amplia trayectoria como documentalista de temática religiosa, que le ha reportado muchísimos premios.

“En un momento como éste, en el que nada parece estar yendo bien, es bueno que nos recuerden que las cosas pueden ser diferentes y, de hecho, fueron diferentes no hace mucho tiempo”. Con estas palabras inicia George Weigel un artículo en First Things donde presentaba con entusiasmo este espléndido documental sobre el decisivo papel de San Juan Pablo II en el final del comunismo y, como consecuencia, en la liberación de media Europa.

Este límpido trabajo de Naglieri recoge, además, cómo es hoy el cimiento moral de una Europa de paz y libertad. Estamos, pues, ante uno de los mayores ejemplos históricos del triunfo del poder espiritual sobre la violencia y la opresión.

Para armar el elocuente documento, el director se sirve de los testimonios de los cardenales Stanislaw Dziwisz, durante muchísimos años secretario personal de San Juan Pablo II y luego su sucesor en la sede de Cracovia, y Miloslav Vlk, arzobispo emérito de Praga; Mons. Slawomir Oder, postulador de su causa de canonización, o del arzobispo de Vilnius, Gintaras Grusas.

Cómo no, con Joaquín Navarro-Valls, portavoz de la Santa Sede entre 1984 y 2006; Zbigniew Brzezinsky y Richard Allen, consejeros de seguridad nacional con Jimmy Carter y Ronald Reagan; Carl Anderson, Caballero Supremo de los Caballeros de Colón; Hanna Suchocka, ex primera ministro polaca; Valdus Adamkus y Vytautas Landsbergis, ex presidentes de Lituania; el historiador polaco Norman Davies y el escritor George Weigel, autor del besteseller Testigo de la esperanza, biografía impoluta del más reciente Papa Santo. A ellos se suman declaraciones de otros periodistas, historiadores, políticos y activistas del sindicato Solidaridad, por ejemplo.

Liberando un continente: Juan Pablo II y la revolución de la libertad es la increíble historia de la fe inquebrantable de un hombre, nacida de un profundo sufrimiento personal, de su firme defensa de la dignidad de la persona humana en medio de los horrores de la ocupación nazi y soviética.

Y es también un filme muy cuidado, de ideas y mensajes cristalinos y directos, sin grietas, acerca de ese objetivo de Juan Pablo II, siempre sin perder de vista su labor pastoral y desde la atractiva vertiente de hombre de Estado. Por ello, Naglieri ofrece abundante y variado material informativo, a partir de fotografías y películas históricas, donde el blanco y el negro se mezclan con el color hasta presentar un feliz montaje fluido que no decae en sus 93 minutos de duración.

En esta ocasión, Naglieri ha preferido vehicular la cinta en orden cronológico, y de esta manera se mezclan armoniosamente los hechos más relevantes de la vida de Karol Wojtyla y la historia de Polonia en el siglo XX. Pero donde el realizador hinca el diente es en la última hora.

Ese tiempo le sirve a Naglieri para exhibir la década decisiva en la que Juan Pablo II daría al traste con el comunismo, entre 1979 y 1989. Incluso la película precisa el día exacto del inicio de la consunción, el 2 de junio. Ese día el Papa realizó su primera visita a su Polonia natal donde pronunció una homilía en la Plaza de la Victoria de Varsovia, donde sonaron esas inolvidables palabras: “Que tu Espíritu descienda y renueve la faz de la Tierra, la faz de esta tierra”.

Para quienes ya sólo guarden memoria del Juan Pablo II de sus últimos años, este documental recuerda además “qué hombre tan atractivo, carismático y absolutamente convincente era Juan Pablo II cuando estaba en la cima de su condición física. Irradiaba confianza y fortaleza moral y el coraje de un guerrero feliz. Y por todo eso, aquellos sobre cuyas vidas impactó se sintieron poderosos”.

Como dato anecdótico, la narración de la versión original está locutada por el actor Jim Caviezel. No dejen de consultar la web del filme, que les va a sorprender: www.liberandouncontinente.com.

Por José Luis Panero

@PALOMITERO