Un proyecto que surge de la creatividad de un grupo de estudiantes peruanos Un motor hace girar una biela, ésta a su vez, sacude la cola de un pez, para que pueda avanzar. Darle movimiento a las aletas es lo principal. Para Renzo Calcina Ortiz, “este es el pez robot que puede salvar el mundo”, confiesa el alumno del 4 ciclo de Ingeniería mecánica de la Universidad de Ingeniería y Tecnología (UTEC).
El “nano pez” que nada en ríos y lagos contaminados puede salvar el planeta tierra. Se trata de un pez robot de piezas de plástico recicladas que absorbe metales pesados para purificar el agua. Un pez nacido del ingenio, la dedicación y la amistad ahora busca cómplices para poder convertirse en una realidad.
El proyecto del dispositivo que, en un futuro cercano, podría limpiar fuentes de agua contaminadas, por la minería ilegal y otras actividades extractivas, nació en una clase de “Química verde”, así lo recordó también Daniel Tupac Yupanqui Herrera, joven peruano estudiante de la UTEC, quien participó en la invención de este robot.
“Pez robot”
Las nanopartículas (generadas a través de procesos químicos con plantas y otros elementos naturales) atraen metales pesados, explica Renzo, quien junto a Daniel investigaba la reacción de estos metales, mientras iba naciendo entre ellos una profunda amistad en los primeros ciclos de su carrera.
“Nos interesamos mucho en la producción de nanopartículas a través de plantas oriundas del Perú”. Las “nanoparticulas” que lograron del aguaymanto, el cedrón y la uña de gato, fueron partículas de hierro, que atraen metales pesados como mercurio, plomo, cobre y cobalto que contaminan las aguas de la Amazonía.
La biomasa que resulta de la combinación de dichos metales es el hallazgo más importante, precisa Daniel. Y es que tiene una aplicación similar a las “nanopartículas”. Es decir, la biomasa generada, a partir de algas pardas, atrae mercurio, mientras que la cáscara de naranja, atrae plomo.
El pez que salvará los océanos
El más interesado en hacer realidad este sueño, de proteger los océanos, es su profesor Alejandro Ríos Cuadros, quien les sugirió llevar el proyecto a un producto más real, la creación de un prototipo, que pueda aplicar estas propiedades en la realidad.
Así nació la idea del pez que limpia las aguas de los ríos y lagunas contaminadas, por la minería ilegal. El “nano pez” solo es un vehículo que transporta la biomasa, y la protege de los animales, rocas y plantas que podrían interferir en el proceso de absorción de metales pesados.
El uso de tubos galvanizados de distintos diámetros, y botellas plásticas no es gratuito, lo que se busca es camuflar al pez en el agua, sin alterar el hábitat de peces, crústaceos, reptiles y otros seres vivos.
Cómplices para salvar las aguas
Pero todo pez necesita branquias, este equipo de osados estudiantes trabaja en ello; filtran el agua para darle movimiento a las aletas. “Si alguien tiene una mejer idea puede sumarse al proyecto y ayudarnos a optimizarlo”, sonríe Renzo.
Los jóvenes estudiantes participan con este proyecto, en un programa de incubación científica que hará realidad este sueño. Solo necesitan de profesionales o estudiantes interesados en salvar los océanos del planeta tierra.
Inscribirse a www.buscamoscomplices.pe para descontaminar ríos y lagunas.