Se trata de uno de los mayores símbolos de Antioquia, el departamento colombiano ubicado al noreste del país, cuya capital, Medellín, será una de las que recibirá la visita del Papa el 9 de septiembre.
Su nombre es carriel de Jericó (municipio de Antioquia), un bolso típico local hecho de cuero, siendo una prenda fuertemente arraigada a su tierra y muy utilizada por los arrieros, esas personas encargadas del transporte de diferentes productos y habitualmente sobre el lomo de una mula.
Precisamente, este tradicional objeto, le será obsequiado al papa Francisco gracias al encargo del obispo Noel Antonio Londoño Buitrago, de la Diócesis de Jericó, indica El Colombiano.
Pero detrás de este singular regalo hay un sinfín de tradición, pues las personas a cargo de esta elaboración pertenecen a una familia de artesanos dedicaos a esta labor desde hace muchos años.
Todo comenzó Darío Agudelo, un hombre de 83 años que acompaña a su hijo Oliverio en este desafío. Es que la condición de la propuesta era que no fuera una sola persona, sino toda la familia la encargada de trabajar en este objeto que recibirá el Papa.
Y esto no es una exageración, pues para un buen trabajo de este tipo se necesitan muchas manos habida cuenta de los detalles necesarios, el proceso de elaboración, entre ellos la cantidad de piezas y bolsillos que llevan estos bolsos.
“Lo más especial del carriel del Papa —señala Saulo— es que todos sus materiales son naturales. Lleva pieles de becerro, cerdo y cabretilla, que es la primera piel de los novillos; charol, y hasta el cáñamo con el que se cosen las piezas es de fibras naturales”, expresa a ese medio otro de los hijos de Darío, Saulo.
Los nietos de Darío también se mostraron contentos con esta oportunidad, prosigue El Colombiano. “Somos católicos y hacer un carriel para el Papa es un honor”, expresa Santiago, el menor de los tres hijos de Saulo.
El carriel ya está pronto y a la espera del Papa. De momento permanece en la Catedral de Jericó, cuya patrona es la Virgen de las Mercedes, una de las iglesias construidas en ladrillo más grande de América Latina.
Pero no será la primera vez que un pontífice recibe un carriel, pues Juan Pablo II también fue obsequiado con uno similar cuando visitó el país en el año 1986. Una vez más, gracias a este bolso tan típico, Francisco podrá tomar contacto con la realidad de la gente colombiana, con sus más ricas tradiciones. Para eso también llega a Colombia, que a esta altura ya cuenta los segundos para ese gran momento.
Hoy celebramos a...