Se intensifican los controles, además de la asistencia y las campañas “Si bien en este momento hay una situación de necesidad por las inundaciones, lo que en realidad se ve afectado en este momento son sus modos de vida. En este momento, más allá de la situación crítica, no estamos teniendo brotes de enfermedades respiratorias o gastrointestinales”, expresó a ABC de Paraguay el doctor Biyan Pakraván, uno de los encargados de la situación sanitaria en el sur de Paraguay, en este caso haciendo referencia al departamento de Ñeembucú.
Es que los pobladores de los departamentos paraguayos ubicados en esa zona del país como el propio Ñeembucú (Guazú Cua, Laureles, Tacuaras y San Juan), Misiones (Yabebyry) e Itapuá están sufriendo desde hace varias semanas las consecuencias de las inundaciones que de momento han dejado más de 30.000 damnificados debido al crecimiento del Río Uruguay y Panamá.
El abandono de los hogares (en algunos casos), la pérdida de cultivos, ganado y hasta niños yendo a la escuela descalzos son algunos de los efectos y padecimientos actuales. A esto se suma el brote de enfermedades (respiratorias y gastrointestinales principalmente).
En la zona custodiada por el doctor Pakraván el tema parce estar “controlado”. Sin embargo, en otras localidades como Yabebyry en Misiones un gran porcentaje de personas están sufriendo algún problema de salud, en su mayoría intestinales debido al agua, indica Última Hora.
Esto generó el envío de un contingente de 12 médicos para asistir a las familias afectadas y distribuir medicamentos.
Solidaridad activada
Una vez la hora de la solidaridad se hace presente en Paraguay. El obispo de Itapúa, Francisco Pistilli, está al frente de una iniciativa denominada Itapúa Solidaria, que este jueves lanzó su tercera edición.
Se trata de una campaña coordinada por la Diócesis de Encarnación, además de las autoridades locales y tiene como objetivo es recolectar ropa, alimentos, además de recursos económicos y organizar diversas actividades.
El lanzamiento de esta propuesta se hizo desde la propia explanada de la Iglesia Catedral en Encarnación y en las primeras horas ya había recibido más de 1.000 kilos de víveres de la Policía Nacional y 600 kilos de yerba mate, entre otras, consigna La Nación.
Pero no es la única campaña que se está desarrollando en pos de los damnificados por estas horas, sino que hay otras impulsadas por diversas organizaciones, además de medios de comunicación.
¿Habrá solución definitiva?
Una vez más el agua genera estragos en esta zona de Paraguay y una de las interrogantes recurrentes cuando se repiten estos episodios tiene que ver con el trabajo de parte de las autoridades para evitar estas situaciones.
Una de las principales críticas que se expresan son las vinculadas a los aspectos coyunturales, esas medidas que se toman cuando sucede la emergencia (es recurrente la activación de algún plan pasajero para apurar el envío de recursos) y no de fondo que se dan cuando hay crecida de ríos.
De momento, las inundaciones activan la solidaridad de Paraguay, un país, al igual que otros del Cono Sur (en Uruguay en este momento también hay cientos de desplazados por inundaciones), acostumbrado a lidiar con estas situaciones.
