El Departamento de Estado de los Estados Unidos anunció que suspenderá la restricción sobre el número de refugiados a los que se les permite entrar al país. Ello ocurre tras verificar la caída en el número de arribos a la Unión Americana los meses recientes, debido a los intentos del presidente Trump de limitar su entrada.
Un informe reciente del Pew Research Center reportó que los arribos de refugiados a la Unión Americana cayeron en casi todos los estados (excepto en cuatro) en lo que va del año fiscal 2017. En octubre de 2016 entraron 9,945 refugiados por, solamente, 3,316 en abril de 2017.
¿Alguien sabe por qué?
Mediante un correo electrónico enviado a los organismos encargados de ayudar a los refugiados de todo el mundo a solicitar su reasentamiento en Estados Unidos, el Departamento de Estado dijo que aumentará su cuota de alrededor de 900 llegadas semanales a aproximadamente 1.500 refugiados.
Esto ha sucedido muy rápidamente, y todos nos estamos preguntando qué es lo que significa”, dijo a *Los Angeles Times* Jen Smyers, director de políticas de refugiados y abogado del Church World Service (Servicio Mundial de Iglesia), una de las nueve agencias oficiales de Estados Unidos para el reacomodo de los refugiados.
El mismo Smyers subrayó que éstas son “buenas noticias para las personas que están buscando protección y tratando de reunirse con miembros de su familia, pero aún estamos muy lejos de lo que quisiéramos ver” como política eficaz de acogida de refugiados en Estados Unidos.
Miles estaban en el limbo
El repentino y silencioso cambio experimentado en esta política por el Departamento de Estado afectaría a decenas de miles de refugiados que han completado el largo proceso de aplicación (cerca de dos años) para obtener su estancia en Estados Unidos, pero que han vivido en el limbo, atrapados en medio de la batalla desatada por la orden ejecutiva de Trump que intentaba prohibir el acceso.
El anuncio del Departamento de Estado se produjo un día después de que una corte federal de apelaciones confirmó una orden judicial nacional que prohibía a la administración Trump la imposición de la prohibición de viajar a Estados Unidos a quienes buscan refugio.
Pero los grupos de ayuda de refugiados dijeron que el movimiento del Departamento se basó en la aprobación del Congreso este mes de fondos para la admisión de refugiados.
Apenas si hay tiempo
El pasado mes de octubre, el Congreso aprobó un proyecto de ley provisional de gasto público que expiró a finales de abril. Cuando los legisladores aprobaron recientemente un presupuesto para el resto del año fiscal, incluyó la financiación de 75.000 admisiones de refugiados, similar a la de años anteriores.
Pero con menos de cinco meses que le quedan al año fiscal 2017 y la prohibición de viaje de Trump aún en apelación en la Corte de Circuito de los Estados Unidos, los grupos de ayuda a los refugiados están preocupados sobre si pueden reasentar a 70.000 refugiados, lejos de los 85.000 admitidos el año pasado.
“Me preocupa que el daño haya sido hecho internacionalmente”, dijo Erol Kekic, director ejecutivo del programa de inmigración y refugiados de Church World Service. “Las agencias que procesan refugiados han sido tan severamente recortadas en presupuesto y en personal despedido que incluso si el dinero está disponible, tomará tiempo” volverlas a poner en funcionamiento.
*Con información de Los Angeles Times*
Hoy celebramos a...