“Si pudiera amarte más que todos los santos y ángeles juntos…”
El corazón de Simon (Petros) es el deseo de aprender a amar incondicionalmente como Dios nos ama. Alanna-Marie Boudreau explora este tema con un ritmo acústico de guitarra. Le da a la melodía una sensación de suspensión al dejar que las cuerdas suenen y cambien los acordes a través de las notas bajas.
Nos encantan los arreglos de la percusión, el conjunto de batería compuesto de tambores timbales en su mayoría silenciados, dan una sensación casi tribal. El baterista emplea rollos de platillos en la entrada de cada coro que, después de una breve pausa en la música, amplía el sonido y hace que el estribillo suene como si estuviera golpeando el suelo corriendo. Su elección de bajo y coro de voces masculinas son un lindo contraste con la voz líder de ella y hace que este sonido acústico se amplíe mucho más.
Alanna-Marie Boudreau es una artista que no te puedes perder. Sus melodías son cautivadoras y exploradoras sin desafiar o subestimar al espectador y es obvio que se esfuerza mucho en sus arreglos.
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Por J-P Mauro