La política migratoria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha tenido un efecto colateral importante para los intereses de América Latina: la unión entre países del subcontinente (el enorme territorio desde el Río Bravo hasta la Patagonia). Entre ellos, dos potencias económicas, políticas y culturales como lo son México y Chile.
Durante un desayuno-conferencia organizado por Meditrends América y la Fundación Promoción Social de la Cultura del Instituto Cervantes el pasado 24 de febrero en Roma, los embajadores de ambos países en Italia, Juan José Guerra y Fernando Ayala, sostuvieron, palabras más, palabras menos, que el asunto del muro de Trump tiene un obstáculo enorme: los puentes del Papa Francisco.
La participación del Pontífice argentino en el cierre del Sexto Foro Internacional Migración y Paz ha sido decisiva en estos días en los que se juega, sin lugar a dudas, el futuro del continente americano, la mayor reserva del catolicismo con poco más de 40 por ciento de los católicos que hay en el mundo
Las cuatro acciones que delineó el Papa Francisco para la política migratoria del siglo XXI, acoger, proteger, promover e integrar, han sido retomadas por los embajadores de México y Chile en Italia, y muy pronto se habrán de convertir en la bandera mediante la cual los pueblos de América Latina propondrán una acción conjunta a Estados Unidos.
Al Papa se le escucha
El embajador de México, Juan José Guerra, dijo en el encuentro con los medios italianos: “Mi opinión es que la nueva política de Estados Unidos le va a generar a México muchos beneficios, porque así mi país podrá cortar ese cordón umbilical que durante años nos ha cerrado hacia otras fronteras, fortaleciéndonos hacia adentro y hacia fuera”.
Y subrayó: “Al Papa Francisco los mexicanos lo queremos mucho y es una guía espiritual para los mexicanos, de todos los cultos y un líder moral para todas las religiones” añadiendo sobre el tema más candente de la hora actual mexicana: “a los migrantes hay que apoyarlos, recibirlos hacerlos que crezcan y que se integren”.
Por su parte, el embajador de Chile en Italia, Fernando Ayala, consideró que “toda América Latina ha prestado mucha atención a las palabras del Papa Francisco cuando dijo que más que muros en el mundo, se necesitan puentes”. Para el diplomático chileno, se trata de “un mensaje claro respecto a lo que debe ser la posición de nuestros países: abrir las puertas, recibir, integrar y compartir”.
Finalmente, queda claro –y así se vio en la reciente visita que hicieron a México el secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson y el de Seguridad Nacional, John Kelly—lo que dijo Ayala en el Foro, que esta nación “tampoco podrá prescindir de la emigración” por dos factores: la productividad de los migrantes y la baja tasa de natalidad de los estadounidenses, además de la cooperación comercial y en otras áreas prioritarias.
Hoy celebramos a...