590 detenciones: El miedo más que palpable, es radianteAl menos 590 personas indocumentadas –o sospechosas de serlo– han sido detenidas estos últimos días por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, lo que provocó una oleada de miedo en las comunidades inmigrantes.
En Los Ángeles, California, donde se concentra la mayor población de inmigrantes de la Unión Americana, el pastor metodista de la iglesia unitaria (Unión Metodista) Fred Morris dijo a CBS que en su congregación (predominantemente hispana): “hay una terrible sensación de miedo”.
Más adelante el pastor Morris subrayó que el miedo “es más que palpable; es radiante”. Muchos que han observado lo que sucede en los barrios de hispanos de las grandes ciudades de Estados Unidos coinciden con el pastor : “La gente está aterrorizada. Están sentados ahí, en silencio, aturdidos”.
A través de las redes sociales y de cientos de despachos legales –que han emergido a contrarreloj– grupos de derechos humanos han brindado asistencia las 24 horas en los últimos días, incluso cuando los agentes federales rechazaron la versión de que las redadas reflejaban “una visión amplia” del decreto inmigratorio firmado por el presidente Trump, según el reporte del periódico Hoy de Los Ángeles.
La única sensación es el miedo
Las redadas de los últimos días han incluido al menos a seis estados del país: California, Georgia, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Arizona y Texas. No obstante, los agentes del ICE han insistido en que se trata de “operaciones específicas de control; operaciones de rutina”, destinadas a detener a personas “con antecedentes criminales”.
Pero, parece que los agentes del ICE están ampliando el tema de las redadas hacia personas que no tienen antecedentes criminales sino, simplemente, son indocumentados que pudieran haber cometido alguna falta administrativa o sean “ilegales”.
A esta situación se agrega el miedo extendido por reportes falsos de redadas y detenciones que circulan por redes sociales, haciendo que el temor cunda, sobre todo entre los hijos (nacidos en Estados Unidos y, por tanto, ciudadanos de ese país) de padres sin documentos legales para acreditar su estancia.
Los activistas por-inmigrantes y los abogados de grupos que apoyan a los inmigrantes han dicho que las acciones del ICE no son las acciones rutinarias sino que ha habido un aumento de la actividad bajo la orden ejecutiva recién firmada por el Presidente Trump, que cambió las prioridades y los criterios de deportación.
Sean o no más amplias que las redadas del ex presidente Barack Obama, quien deportó a más personas que nadie en la historia de la Unión Americana, lo cierto es que el miedo, como dijo el pastor Morris, nunca había sido tan palpable entre los hispanos que habitan –con y sin papeles—en ese país.