Colombia gestiona con Mali la “segura y pronta” liberación de la misionera colombiana que fue secuestrada En las últimas horas se han intensificado las gestiones para la liberación de la religiosa colombiana Gloria Cecilia Narváez Argoti, perteneciente a la congregación de las Hermanas Franciscanas de María Inmaculada, y que fuera secuestrada en una parroquia católica el pasado 7 de febrero por un grupo de hombres armados en el sur de Mali, África.
“La embajada de Colombia en Ghana coordinó con las autoridades de Mali por medio de sus homólogos en Acra, quienes informaron que tanto el ejército, la policía como su gobierno están realizando las labores pertinentes para lograr la segura y pronta liberación de la religiosa”, señaló el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, reproduce la Agencia ANSA.
La hermana Luz Marina Quiceno, superiora provincial de la Congregación en la localidad colombiana de Pasto, pidió el respeto por la integridad y el regreso inmediato de la religiosa de 56 años, al tiempo que la describió como una “misionera a la que le encanta trabajar con los pobres”, indica la agencia.
Al momento del secuestro, señalan las diversas crónicas, sobre las 21 horas del martes los hombres irrumpieron en la parroquia de Karangasso, perteneciente a la provincia de Koutiala, y se llevaron a la misionera colombiana, que no se encontraba sola y estaba junto a otras.
De momento, el secuestro no ha sido reivindicado a pesar de que haya trascendido que los hombres armados habrían ingresado bruscamente en la parroquia al grito de que “eran yihadistas”, además de que dos sospechosos malienses fueron detenidos, tal cual revelaron algunas fuerzas locales de seguridad.
Ante la confusión generalizada las Fuerzas Armadas de Mali han incrementado la tarea de búsqueda, como confirmó la propia Cancillería de Colombia.
Lo propio hacen los obispos locales, que se están movilizando por la zona para obtener más información, indicó la agencia Fides.
Por su parte, en América Latina, en las últimas horas la Conferencia Episcopal de Colombia se sumó al pedido de la Cancillería y también reclamó la pronta liberación de la religiosa a través de un comunicado.
“Con nuestra voz de aliento de fe y esperanza, acompañamos en estos momentos a la familia de la hermana Gloria Cecilia y a cada una de las Hermanas Franciscanas de María Inmaculada”, indican los obispos, quienes invitan a los colombianos a unirse en oración para que se respete la vida y se devuelva la libertad de la hermana Gloria, quien “como muchos discípulos del Señor, ha decidido entregar su vida al servicio de los más pobres y necesitados”, concluyen.