¿Puede un presidente o rey ser santo... y ayudar ahora a los políticos y gobernantes a hacer un buen servicio?
Decía el cardenal Jorge Bergoglio en la misa por el fallecimiento del ex presidente argentino Néstor Kirchner, alguien que públicamente había al menos cuestionado al entonces arzobispo de Buenos Aires, que los mandatarios son “ungidos por el pueblo” para que los conduzcan.
Estas personas que asumen semejantes responsabilidades políticas, en las que se depositan tantas expectativas, ¿pueden ser santos?
¿Un presidente santo es un buen presidente?
Aunque su santidad dependerá de ellos a lo largo de toda su vida y no de lo que hagan o dejen de hacer como presidentes, repasamos aquí algunos nombres de líderes mundiales que lograron asumir grandes responsabilidades, y la Iglesia, tras su fallecimiento, ha reconocido o está en vías de reconocer su santidad.
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