Se acerca Navidad. Es buen momento para el cine navideño de calidad y en familia. No es oro todo lo que reluce en pantalla. Ahí van algunas recomendaciones básicas para una Navidad de cine.
- Natividad (2006)Hay que verla ni que sea una vez. Afronta explícitamente el nacimiento de Jesús, con un interesante trato dado a san José y a los sabios de Oriente. Retrato bienintencionado del Evangelio con voluntad didáctica, aunque con leve profundidad mariana.
- Los 3 padrinos (1948), del genial John Ford y con John Wayne. Wéstern y epifanía a partir de los relatos navideños del Evangelio. Tres atracadores se hacen cargo de un bebé huérfano. El pintoresco grupo vivirá situaciones atípicas en un wéstern sin balas. Mensaje moral sobre el sacrificio y la misión, el valor de la amistad y la familia, y la redención. Un clásico mayúsculo.
- ¡Qué bello es vivir! (1946). Capra puro. Dramática, amable y hermosa, cuenta la historia de Bailey (James Stewart), un buen hombre que arruinado por dejar dinero a todo un pueblo piensa en el suicidio. Clarence, un ángel de la guarda, le enseña cómo sería la vida si no hubiese existido nunca. Ni su familia ni el mundo sería el mismo sin alguno de nosotros. Ideal para recuperar una mirada agradecida sobre la propia vida. Un clásico de la misericordia y el perdón. Imprescindible.
- Family Man (2000), versión moderna de la anterior. Con un genial Nicolas Cage, cuenta la entrañable historia de un hombre de negocios que dejó escapar a la mujer de su vida. Convertido en triunfador, se topa en Navidad con un peculiar ángel que le dará otra vida: esposa, hijos, y una existencia muy modesta… ¿Lo aceptará?
- Son muchas las adaptaciones del clásico Cuento de Navidad de Dickens: la tierna La Navidad de Mickey (1983), la entrañable Los teleñecos en Cuentos de Navidad (1992), etc. Una de las adaptaciones más originales, imaginativas e ineludibles es el Cuento de Navidad (2009) de Zemeckis (que ya se había acercado a la Navidad con la maravillosa Polar Express, 2004). Carrey, Firth, Oldman y Wright dan vigencia a Dickens presentando, a través de valores universales y de fondo cristiano, la necesidad de todo hombre de descubrir el bien y de ocuparse de los demás.
- Los fantasmas atacan al jefe (1988). Versión moderna del clásico de Dickens, con un papel pensado para el genial Bill Murray. A veces hay que reírse a lo grande. Animadísima, excéntrica y optimista, presenta la lucha del bien y del mal y situaciones hilarantes, con cierta parodia de Los Cazafantasmas. Una propuesta para que los yuppies dejen, como se canta al final, un poco de amor en el corazón.
- ¿Quieren un cuento de Navidad sin Dickens? Vean Smoke (1995), con guión de Paul Auster y dirección impecable de Wayne Wang. Antológicos veinte últimos minutos, que constituyen el relato poético de Auster que dio origen al film. Describe la vida corriente y cenicienta de personajes de Brooklyn. El estanquero (soberbio Harvey Keitel), fotógrafo aficionado y meticuloso, es el confidente de todos y cruzará las distintas historias. A partir de una bella historia navideña, ayudará a un novelista atrapado en su viudedad a volver a escribir.
- Love actually (2003). Gamberra, grosera y romántica, y no apta para todos los públicos. Diez historias de amor en un collage navideño que acaba entrelazándose. Es un buen retrato de nuestro tiempo: amores adúlteros, frustrados, sensibles, honestos, etc. que se mezclan para explicar la necesidad de una vida alegre y de un amor verdadero que sostenga la mediocridad. Como se canta, el amor lo es todo.
- Pesadilla antes de Navidad (1993), de Tim Burton. Comedia de estética espectral. Jack Skeleton, rey de Halloween, ve renacer su humanidad gracias a su relación con una muñeca rota. Jack sospecha que la Navidad es más interesante que Halloween; por eso, secuestrará a Santa Claus para ocupar su cargo. Pero las cosas no saldrán como esperaba.
- Feliz Navidad (2005): Interesante para nuestro tiempo de conflictos. Narra la escena histórica de la I Guerra Mundial en la que los frentes alemanes, franceses e ingleses acordaron una tregua improvisada para celebrar juntos la noche de Navidad en las trincheras. En esa noche de paz, matarse no es posible. Un mensaje que nos invita a no olvidar cómo estamos cuando miramos lo bello y verdadero.
Hoy celebramos a...